Nadal quiere volver a reinar en Roland Garros tras el tropiezo del pasado año

Comienzan dos semanas de competición sobre la arcilla de Roland Garros. El torneo preferido por los tenistas españoles, que se han traído a casa en once ocasiones. Reinar en París el último día era algo que se estaba convirtiendo en habitual con Rafa Nadal, cuatro veces campeón. Pero antes lo hicieron nombres como Gimeno, Santana, Ferrero, Costa, Bruguera o Moyá.

Esa dinámica positiva se rompió en la pasada edición, cuando el de Manacor cayó eliminado en octavos de final ante Robin Soderling, a la postre subcampeón sobre la arena parisina. Nadal perdía así una racha de 31 victorias en la capital francesa y la posibilidad de igualar a Bjorn Borg con cinco entorchados consecutivos. Sería Roger Federer el que se alzase con la victoria final.

Con estos precedentes empieza la edición de 2010. El suizo y número uno del mundo pretende revalidar un título que, con la llegada de Nadal, pensó en no inscribir jamás en su palmarés. Federer ha demostrado estar en un buen estado de forma y acoplado a la tierra batida, firmando el subcampeonato en el pasado Master 1000 de Madrid. Nadal le ganó la partida.

El de Manacor parece haber recuperado su mejor tenis, ese que acabó perdiendo debido a las lesiones en sus rodillas. El resumen de su temporada en tierra batida lo define una palabra: espectacular. Se ha llevado los torneos de Montecarlo, Roma y el de Madrid y, muy acertadamente, decidió no jugar el Godó para así llegar más descansado a Roland Garros.

Como rivales, pues un poco de todo. Habrá que ver el estado en el que llega Novak Djokovic, que se ausentó de Madrid por problemas de alergia, o de Juan Carlos Ferrero, con una tendinitis en la rodilla. Soderling es un duro rival al que siempre se le ha dado bien la arcilla de París y Verdasco, subcampeón en Niza, o Ferrer ya ha demostrado en la temporada de tierra batida que pueden ganar a cualquiera. Murray, el cuatro del mundo, es otros de los jugadores a tener en cuenta. Del "top ten" se cae unJuan Martín del Potro que ya ha anunciado que ni siquiera llegará al próximo US Open.