Nuria González, divertida tarde de patinaje sobre hielo con sus hijos, Iván y Alma

MADRID, 30 (CHANCE)

Son muchos los famosos que aprovechando las vacaciones escolares de Navidad disfrutan al máximo de su tiempo libre junto a los más pequeños de la casa, empapándose de las actividades que ofrece la capital. Así han sido muchos lo que se han dejado ver visitando la Gran Pista de Hielo en la Plaza Colón, como Nuria González, que se divirtió de lo lindo con sus hijos mientras su marido, el empresario Fernando Fernández Tapias cumplía con sus compromisos profesionales.

Sin duda una maravillosa oferta a la altura de otras ciudades Internacionales que celebran la Navidad disfrutando de conocidas pistas de hielo como Rockefeller Center en Nueva York o la Pista de Hielo del Museo de Historia Natural en Londres.

Nuria González llegaba a la pista de patinaje con sus hijos, Alma e Iván, más rezagado. Haciendo gala de su habitual simpatía, la mujer del empresario Fernando Fernández Tapias felicitó la Navidad a los medios allí presentes y aprovechó para comentar cómo habían pasado estas entrañables fiestas "muy bien, tranquilitos, en familia". Fiel a su elegancia, la ex modelo eligió para la ocasión un pantalón negro de vestir y plumífero beige con cuello y puños de piel.

A sus cuarenta y cuatro años, Nuria González se encuentra en la plenitud de la vida y lo hace en un momento muy bueno, pues ha formado una gran familia junto al empresario, Fernando Fernández Tapias. El hecho de que la diferencia de edad entre ellos sea de 33 años no ha supuesto ningún inconveniente para su felicidad. De hecho, ella es la tercera esposa para el directivo del Real Madrid, que estuvo casado anteriormente con Chiqui Riva Surardíaz, cuando él solo tenía 25 años. Después llegó Juana Courel y aunque el divorcio le costó 2.000 millones de pesetas, quiso probar suerte por tercera vez y parece que el tiempo les ha dado la razón, formando una de las parejas más consolidadas del panorama nacional.

Nuria y Fernando contrajeron matrimonio en octubre del 2002, después de cinco años de relación. Solo cuatro meses después de aquel día, la pareja anunciaba que esperaba la llegada al mundo de su primer hijo, Iván. En junio del 2007 nacía su hija, Alma, la benjamina de la familia.

Paloma Segrelles, aficionada al patinaje, también visitó la gran pista de hielo de la plaza de colón ante de la ausencia de sus hijas, Tiziana y Paloma.