¿Por qué fallan los deportistas españoles en las finales?

  • Tras la decepción en el Mundial de natación de Shanghái y la pobre imagen que están dando los atletas españoles en el Mundial de atletismo de Daegu, os contamos porqué los deportistas españoles fallan en los momentos decisivos a pesar de llegar con buenas marcas a las finales.
Pestano señala que "ha pasado lo mismo de siempre"
Pestano señala que "ha pasado lo mismo de siempre"
Roberto Díaz

Una medalla tras ocho días de competición es el pobre bagaje de la expedición española en el Mundial de atletismo de Daegu 2011. Natalia Rodríguez, bronce en 1.500 metros, ha sido la única atleta de nuestro país que ha logrado cumplir las expectativas en Corea del Sur hasta el momento.

Por este motivo y tras los fiascos en años anteriores en otras disciplinas individuales como la natación, donde en el pasado mundial celebrado en Shanghái, España sólo consiguió medallas en la modalidad de natación sincronizada, hemos analizado por qué fallan nuestros atletas en los momentos claves.

Llama la atención si lo comparamos con otros deportes como el fútbol, tenis o ciclismo, donde nuestros deportistas están entre los mejores del mundo.

El motivo del fracaso: El control del estrés

En la actualidad, el mundo del deporte ha tenido una repercusión muy elevada a través de los medios de comunicación. Cuando llega una cita tan importante como un Europeo, un Mundial o unos Juegos Olímpicos hay muchos deportistas que se ven sorprendidos por una gran repercusión, que habitualmente no están acostumbrados a vivir. Por este motivo, en los últimos años ha saltado a escena la gran importancia que tiene la preparación no solo física de los atletas, sino psicológica y mental.

La psicóloga deportiva María José Peña Pardo nos explica el porqué de esta disminución en el rendimiento del deportista cuando llegan a una final: "El problema reside en su capacidad para controlar el estrés. Ante una situación de máxima tensión, aparece el eustrés (estrés bueno), que está compuesto por tres hormonas que son la adrenalina (interés), dopamina (concentración) y la serotonina (afecta al estado de ánimo). Cuando el deportista no es capaz de controlar el nivel de estrés, éste pasa a convertirse en lo que se denomina distrés (estrés malo), que segrega a la sangre una hormona llamada cortisol, que hace disminuir el rendimiento de un deportista".

El coach deportivo de T3iple Sport, Fernando Garrido, asegura que esa disminución de rendimiento puede variar entre un 10% y un 40% dependiendo de cada deportista.

El poder de la mente y los miedos a ganar

Se ha demostrado que hay deportistas con grandes aptitudes que no llegan a la élite por ser "débiles de mentes" ¿Pero eso es así? Está demostrado científicamente que la motivación y la habilidad de controlar el estrés está directamente ligado al rendimiento físico.

Cada vez más en el deporte mundial, no tanto en el español, los deportistas se preocupan del entrenamiento mental. María José Peña tiene claro que es primordial que un deportista sea capaz de controlar su mente: "Los atletas que no están preparados mentalmente, puede perder el control y sentirse muy presionados y llevarlo al límite, lo que repercute negativamente en su rendimiento".

Por su parte, Fernando Garrido cree que la preparación previa es la base del éxito: "Tradicionalmente en España no hay costumbre de que los deportistas vayan al psicólogo o tengan un coach deportivo. En los deportistas de élite, el rendimiento aumenta de manera importante, aunque es difícil de predecir un porcentaje. Nuestro país todavía va un escalón por detrás, salvo excepciones, con respecto a otros países y es ahora cuando los deportistas españoles comienza a preocuparse por su preparación mental".   

La selección española de fútbol pasó por un proceso parecido. Como comenta Fernando Garrido, que además fue jefe de prensa de la Real Federación Española de Fútbol casi una década, el éxito se ha logrado por varios factores: "Quizás es cierto que siempre hemos estado algo acomplejados respecto a otros países, pero el éxito de la selección española de fútbol viene fundamentado en varios pilares. El primero es el gran grupo que se ha creado, donde hay jugadores de enorme calidad que lo han ganado todo en categorías inferiores.

Segundo, hemos tenido la suerte que en otras ocasiones nos ha dado la espalda y fundamentalmente hemos cambiado la forma de pensar. Ahora pensamos que podemos ganar a cualquiera, antes siempre teníamos un miedo, una barrera, que hemos sabido controlar y superar".

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