Queen's despide a sus campeones de 2008 y 2009, Nadal y Murray

Londres.- El primer torneo sobre hierba de la temporada, Queen's, despidió hoy al defensor del título, el británico Andy Murray, y al ganador de esta competición en 2008, el español Rafael Nadal, que perdió su primer partido en más de dos meses.

La caída en cuartos de final de Nadal y Murray, primer y tercer favoritos, respectivamente, deja el torneo sin los principales cabeza de serie, después de que el jueves tropezaran también el estadounidense Andy Roddick, el serbio Novak Djokovic y el croata Marin Cilin.

Feliciano López, único español que permanece en esta lucha, retiró hoy por 6-7(5) y 4-6 a Rafa Nadal, que vuelve a su casa, en Mallorca, para "disfrutar un poco de la familia y los amigos", seguir el Mundial de fútbol "relajado en el sofá" y "descansar" para Wimbledon.

El verdugo de Nadal se enfrentará en semifinales al estadounidense Mardy Fish, que venció en cuartos de final al francés Michael Llodra por 6-4, 6-4.

Fue el propio Fish el que se deshizo hoy también del británico Andy Murray, tercer cabeza de lista y ganador del torneo en 2009, por 6-4, 1-6, 7-6(2). Era un partido de tercera ronda, iniciado ayer, pero aplazado en el tercer set por falta de luz.

En el duelo de los españoles brillaron las ganas y el riesgo de Feliciano López, que asestaron a Nadal su primera derrota desde el pasado 2 de abril, cuando se le impuso el estadounidense Andy Roddick en el Máster 1000 de Miami por 4-6, 6-3, 6-3.

El cara a cara comenzó a la 13.20 (12.30 GMT) con dos roturas del servicio consecutivas, una para cada jugador.

Ya en el primer juego se vio un bonito intercambio de pelotas cruzadas que fue acercando a los jugadores hasta la red, donde Nadal ofreció dos dejadas que le acabaron dando el punto y por las que, incluso, se disculpó con su amigo "Feli".

Pronto el ya semifinalista del torneo sacó su arma -el saque- y comenzó a anotar puntos directos, hasta doce.

"Creo que hay momentos del partido en los que uno tiene que tirar de sus armas al máximo y explotarlas, y el arma que tengo yo es el saque", indicó Feliciano, que alcanzó en sus servicios una velocidad récord de 222 kilómetros por hora.

Al cabo de una hora de partido, sin nuevas roturas de juego y con una pista central entregada al número uno del mundo, llegaron al "tie break".

Nadal movió a su contrincante por toda la pista para anotarse el tercer punto, buscó la derecha de su rival -zurdo, como él-, pero no le valió para embolsarse esa primera manga.

Tal y como reconoció después Feliciano, el de Manacor supo encontrar su revés en muchos momentos del partido y fue eso lo que más le acorraló pero, no obstante, aseguró haberse sentido "muy completo, sin fallos" y "muy concentrado".

El tenista de Toledo, de 28 años, describió su juego de hoy como "muy agresivo", algo necesario, en su opinión, para un duelo con el número uno en el ránking de la ATP, ante el que se arriesgó incluso con segundas bolas de saque, "cosas que no haces habitualmente".

El segundo set fue más rápido. Empezó López rompiendo el servicio en el quinto juego y repitió la hazaña en el noveno. En el siguiente, Feli tuvo a su disposición una bola de partido cuando el marcador indicaba 30-40, pero Nadal dio un magnífico resto y su rival tuvo que luchar por dos puntos más.

"Creo que jugué peor el segundo set y él lo hizo bien. Tuvo muy buenas voleas", dijo el tercer tenista más rico de la historia sobre Feliciano López, al que deseó mucha suerte para ganar el torneo.

Preguntado por el dolor que le acusó ayer en la pierna derecha durante su partido de tercera ronda contra el uzbeco Denis Istomin, Nadal aseguró que lo había vuelto a sentir un poco, pero que "lo positivo" es que no se trata de nada grave o peligroso.

Las bajas de Nadal y Murray a las puertas de semifinales, sorpresa de muchos, dejan el torneo con cuatro aspirantes desde los puestos siete, ocho, doce y catorce entre los cabeza de lista.

Éstos son, por ese orden, el estadounidense Sam Querrey, el español Feliciano López, el francés Michael Llodra y el israelí Dudi Sela.

Celia López