Real Madrid 4-1 Getafe: La BBC golea y sana las heridas blancas

    • Benzema, por partida doble, Bale y Cristiano Ronaldo pusieron los goles del Real Madrid. Alexis maquilló el resultado para el Getafe en la segunda parte.
    • Parte del Bernabéu coreó "¡Florentino, dimisión!" en varios momentos del encuentro.
Benzema marca su segundo gol contra el Getafe
Benzema marca su segundo gol contra el Getafe

El Real Madrid sanó sus heridas con una goleada ante el Getafe (4-1), en el partido en el que los blancos se reencontraban con su afición tras la eliminación de la Copa del Rey por la alineación indebida de Denis Cheryshev y el varapalo sufrido en el clásico ante el Barcelona (0-4). Parte de la afición no desaprovechó la ocasión de gritar "¡Florentino, dimisión!", unos cánticos que otra parte de la grada recriminó.

Rafa Benítez tenía disponible a todas sus estrellas de mediocampo para arriba, a excepción de Isco, sancionado con dos partidos por su entrada a Neymar que le costó la roja. Y no dudó en ponerlas sobre el tapete del Bernabéu, con la BBC en ataque y Modric, Kroos y James en la zona de creación. Del once del Real Madrid, la defensa es la parte más mermada por las lesiones. El técnico madrileño se vio obligado a saltar al campo con una defensa fuera de lo común (Lucas Vázquez, Pepe, Nacho y Danilo).

El Getafe llegó al Bernabéu tras perder en la Copa del Rey ante el Rayo Vallecano (2-0), encuentro donde perdió por lesión a Carlos Vigaray, baja importante para la defensa. Los azulones tenían la ocasión de aprovechar el momento de dudas deportivas y extradeportivas del Real Madrid para repetir la hazaña del 2008, cuando ganaron por primera vez en el coliseo blanco. Sin embargo, el conjunto de Fran Escribá no plantó cara en ningún momento, mostrándose muy flojo en la presión, sin vigilar los movimientos de los futbolistas blancos.

Esa poca intensidad permitió al Real Madrid jugar muy cómodo, tocando rápido y con criterio, con un Modric y James orquestando el juego con la clase que de ellos se espera. Esa superioridad blanca se transformó en gol muy pronto. Benzema, que dejó a un lado sus problemas con la justicia y terminó ovacionado por la afición, no perdonó al recibir un centro perfecto de Pepe desde la banda derecha. Con el interior del pie derecho, el internacional galo hizo el primero. Corría el minuto 4.

Seis minutos después, el propio Benzema tuvo en su cabeza el segundo gol, pero a su potente remate respondió Guaita con una excelsa mano. El francés estaba activo, vivo, con ganas de jugar y hacer jugar. Y llegó su doblete. James la colgó al área, Bale la dejó atrás y el '9' la controló y la colocó en las redes del meta azulón (16').

El Real Madrid, con una cómoda ventaja en el marcador, tuvo unos minutos de trance en la primera parte, que el Getafe aprovechó para acercarse a inmediaciones de Navas y forzarle a hacer su primera parada en el minuto 28. Pero no fueron capaces de recortar distancias, y Bale no perdonó cuando Ronaldo se la dejó dentro del área con la cabeza -y de espaldas-. El galés cargó su zurda y la puso al palo largo.

Sin tiempo para asimilar el 3-0, llegó el cuarto, obra de Ronaldo. Fue el gol que adormiló el partido, pues en la segunda parte no hubo mucha historia que contar. El portugués culminó un buen contragolpe conducido por Kroos batiendo con la pierna derecha a Guaita, convirtiéndose así en el tercer máximo goleador de la historia de la Liga. Desde el 5 de abril no marcaban los tres miembros de la BBC.El Real Madrid se deja llevar y vuelve el runrún

El paso por los vestuarios no sentó bien al espectáculo. El Real Madrid rebajó su dominio, generó menos, y el Getafe tocó más, aunque sin generar peligro, muy inocente. Solo la entrada de Pedro León espoleó un poco a los visitantes, que consiguieron, de córner por mediación de Alexis, maquillar el resultado y firmar el 4-1 definitivo.

El bajón de juego en el segundo acto hizo que volviera el runrún al Bernabéu y que antes de pitar el árbitro el final se vieran numerosos asientos vacíos en las gradas. El Real Madrid calmó las aguas tras una semana difícil, pero desaprovechó una buena oportunidad para lucirse durante los 90 minutos y contentar por completo a la afición.

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