Rivaldo anuncia su retirada a los 43 años por sus problemas en la rodilla derecha

Rivaldo disputará el sábado su último partido de fútbol. Después de anunciar su retirada en dos ocasiones, a la tercera va la vencida. La rodilla derecha del legendario jugador brasileño no agunta más y mañana disputará su último partido como futbolista con la camiseta del Mogi Mirim, equipo que presidía y al que volvió para disputar tres partido para ayudar al club a no descender a la tercera división del fútbol brasileño.

"El dolor de la medicación es soportable durante los partidos, pero el dolor se hace mucho más fuerte cuando pasa el efecto", anunció el jugador.Y es que a sus 43 años, el ganador del Balón de Oro en 1999 seguía teniendo cuerda para rato.Así lo demostró en el partido de la donde anotó un gol de penaltiforzado por su hijoRivaldo Jr, que a su vez fue el autor de dos goles. Esta dupla atacante ya es una de las parejas más mediáticas del fútbol brasileño. "Una vez más,sacrificaré a mi familia por el bien del clubpero espero ver a nuestro equipo en una mejor situación en la competición", dijo cuando volvió a calzarse las botas.

Habitual en el farolillo rojo de la clasificación después de 11 semanas de competición, el Mogi Mirim anotótres victorias consecutivasdesde que Rivaldo se volvió a vestir de corto.Adiós a una zurda mágica

La carrera de Rivaldo se resume en éxitos, jugadas y goles imposibles. El mediapunta brasileño comenzó a destacar durante su etapa en el Palmeiras. De ahí pasó al Deportivo por 1.000 millones (se convirtió en el fichaje más caro de la historia del conjunto gallego) y asombró a España en los 41 partidos que disputó donde anotó 21 goles.

Tras su espectacular año en Riazor, el Barcelona pagó su cláusula de rescisión de 4.000 millones horas antes de que acabara el plazo para inscribir a los futbolistas en la Liga de Campeones. Y en el conjunto culé se convirtió en leyenda. En los 199 partidos que jugó anotó 106 goles y se consagró como el mejor jugador del Mundo tras ganar el Balón de Oro en 1999. Con la elástica blaugrana ganó dos ligas, una Copa del Rey y una Supercopa de Europa.

Tras cinco gloriosas temporadas por el conjunto culé, disputó 40 partidos con el Milan y 90 con Olympiakos antes de pasar por las filas del A.E.K, Sao Paulo, Bunyodkor, Kabuscorp, Sao Caetano y Mogi Mirin.

A nivel de selección también palpó las mieles del éxito. Con una de las mejores selecciones de los últimos tiempos, el mediapunta fue campeón del Mundo en Corea y Japón en 2002 tras derrotar en la final a Alemania y ganó una Confederación y otra Copa América. Los trofeos que merecía uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol.