Lo bonito del deporte es que con esfuerzo y dedicación todos podemos conseguir nuestras metas. La de David era alcanzar la final de un 'Grand Slam' y lo ha logrado a sus 31 años. No todos los tenistas pueden ser unos finos estilistas de la raqueta al estilo de Roger Federer, también los hay currantes y el mejor ejemplo de ellos es Ferrer.
Las buenas actuaciones del alicantino no deberían sorprender a nadie. Su garra le ha mantenido en el 'top' 20 del tenis mundial desde hace ocho años y ahora vive el mejor momento de su carrera deportiva. En el año 2012 se aupó hasta la quinta posición del ránking de la ATP, pero fue a inicios del 2013 cuando logró su mejor clasifición histórica al situarse cuarto.
Sin embargo, el proximo rival del alicantino en la final de Roland Garros le 'robo' ese privilegio. Rafa Nadal regresó como un 'tiro' tras su lesión y la del próximo domingo será su novena final en 2013, de las que ha ganado seis. De esta forma fue recortando puntos hasta superar a David Ferrer, que volvió al número 5, pero rendirse no es su estilo.Cuerpo y mente al servicio de su juego
El tenis se basa en dos estados del cuerpo humano: el físico y el mental, que dan como resultado el estilo de juego propio de cada tenista. El de David es el siguiente:
Ferrer tiene un físico prodigioso que le permite aguantar largos peloteos y llegar a las bolas más complicadas con el oxígeno necesario en su cerebro como para devolverlas con criterio. Quizás no llegue al nivel de Nadal, pero en esta edición de Roland Garros está mostrando unas piernas muy frescas y está exigiendo al límite a sus rivales.
Su estado mental a lo largo de los partidos es superior al de sus rivales. La cabeza de David es una 'roca'. No hay adversidad que le haga tirar la toalla antes de que finalice el partido y ni siquiera se relaja en los en los que tiene el resultado a su favor. Nunca cambia su gesto dentro de la pista, no suele desconcentrarse con protestas al árbitro y no es de los que rompe raquetas tras fallar una bola.
Si conjugamos estos dos estados de David, el resultado es su estilo de juego. Es un tenista muy 'díficil de roer', uno de esos contra los que no se quieren enfrentar el resto de jugadores. No es el más tecnico del mundo, pero es peleón hasta decir basta y su capacidad para alargar los puntos es sobrenatural.
Su concentración en todos los puntos le permite no cometer demasiados errores no forzados a lo largo del partido, aprieta a su rival devolviendo una y otra bola y le mueve por la pista hasta encontrar un hueco suficiente como para hacer un golpe ganador.
Este tipo de juego también le permite ganar muchos puntos 'regalados'. Es decir, por fallos de los rivales que no son tan fuertes mentalmente como el y que cuando han devuelto más de cinco pelotas a su rival intentan ataque 'suicidas' que se quedan en la red o se marchan fuera. Ahí empiezan sus nervios y la templanza de David.
Otra de las mejores facetas del tenis del tenista alicantino es su juego con el resto. El número 5 del ranking mundial es uno de los tenistas más intuitivos del circuito y eso le permite adelantarse a los golpes de los rivales. Tiene una capacidad impresionante para adivinar dónde dirigirá la pelota su rival con el movimiento de su cintura o por la colocación de sus pies.La vitrina de David tiene un hueco reservado para un 'grande'
Al palmarés de Ferrer le falta un 'Grand Slam' para igualarlo al de los grandes tenistas de la historia. Ante Rafa Nadal luchará por conseguir ganar esta edición de Roland Garros y poner la guinda a una vitrina repleta de trofeos de menor nivel.
El de Jávea ha ganado un título de 'Masters' 1000, curiosamente fue el 'Master' de París en 2012, ciudad donde intentará repetir triunfo. Además cuenta con siete victorias en torneos ATP 500 y 12 en ATP 250.
Quizás los tofeos más importantes no los ha conseguido a nivel individual, sino con España. Junto a su rival de la final de Roland Garros y el resto del equipo español, Ferrer ha levantado 3 veces la Copa Davis, en las ediciones de 2008, 2009 y 2011.
El alicantino buscará tocar el cielo en París, demostrar que con esfuerzo se pueden conseguir todos los sueños y 'destronar' al 'rey' de la tierra batida en la Philippe Chatrier, una de las pistas más bonitas e históricas del mundo.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios