Moscú, 16 dic.- Los futbolistas del CSKA Moscú esperan emular al todopoderoso Barcelona en la eliminatoria de octavos de final de la Liga de Campeones que les enfrentará en febrero al Real Madrid.
"No hay ningún rival que sea invencible. Los madridistas también era los favoritos en el reciente derbi ante el Barcelona, pero los catalanes dieron un vuelco a todos los pronósticos", afirmó Yevgueni Aldonin, veterano centrocampista del equipo del Ejército ruso.
Aldonin, que las últimas dos temporadas ha alternado la titularidad con la suplencia en el equipo del Ejército ruso, añadió: "Espero que a nosotros también nos salgan las cosas igual de bien".
"Por supuesto, el sorteo podía haber sido más generoso con nosotros. A estas alturas no hay rivales fáciles. Pero no debemos bajar los brazos, no ha ocurrido nada terrible", destacó.
Por su parte, el defensa Nababkin, que confesó ser un seguidor del equipo madridista desde niño, opinó que "la eliminatoria está al 50 por ciento".
"Es una eliminatoria, así que intentaremos jugar bien en casa y fuera. Será un emparejamiento interesante. No llega muchas veces en la vida la oportunidad de jugar contra un club como el Real Madrid", comentó.
El joven centrocampista Mamáev cree que el partido de ida en el estadio olímpico Luzhnikí (85.000 espectadores) "será un gran espectáculo".
"El Real es un club que no necesita presentación. Nos podía haber tocado un rival menos renombrado, pero en los octavos de final no hay rivales fáciles", aseveró.
Además, se manifestó a favor de jugar el 21 o 22 de febrero, en vez del 14 o 15, fechas en las de todas formas las temperaturas en la capital rusa rondarán los 15-20 grados bajo cero.
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