Nadie se quiere perder la final del Mundial de Clubes. Todos en el Real Madrid saben que es un partido que se juega pocas veces en la carrera de un futbolista, ya que para ello hay que ganar primero la Champions League. El club blanco aún no tiene en sus vitrinas este trofeo, que nació en el año 2006 como sustituto de la Copa Intercontinental.
Sergio Ramos y James han hablado con Ancelotti y han dado el 'ok'. Han superado las pruebas médicas y están en condiciones de jugar ante San Lorenzo de Almagro. El defensa del Real Madrid se reincorporó a la dinámica del grupo en el entrenamiento previo a la final del Mundial de Clubes ante el San Lorenzo.
Después de guardar reposo desde que el martes tuvo que pedir el cambio en la semifinal contra el Cruz Azul mexicano por una sobrecarga muscular la parte posterior del muslo izquierdo, Ramos volvió a entrenarse con sus compañeros en el campo anexo al Gran Estadio de Marrakech.
En los quince minutos abiertos los medios de comunicación, Ramos fue uno más en el grupo, con todos los futbolistas del Real Madrid a disposición de Ancelotti salvo el centrocampista croata Luka Modric, lesionado, que siguió a pie de campo la sesión.
El colombiano James Rodríguez trabajó un día más al máximo, demostrando a su entrenador que está en condiciones de regresar a los terrenos de juego si decide darle la titularidad. Su lesión en el gemelo derecho ya es pasado y podrá reaparecer ante el San Lorenzo desde el inicio o en el transcurso de la final.
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