Simón Elías: Rabadá y Navarro hicieron lo que nadie había hecho ni imaginado

  • El montañero Simón Elías, autor del libro "Rabadá y Navarro. La cordada imposible", reivindica la figura de los montañeros aragoneses como "unos visionarios" del montañismo porque hicieron algo que "nadie había hecho antes ni imaginado hacer".

Zaragoza, 15 ago.- El montañero Simón Elías, autor del libro "Rabadá y Navarro. La cordada imposible", reivindica la figura de los montañeros aragoneses como "unos visionarios" del montañismo porque hicieron algo que "nadie había hecho antes ni imaginado hacer".

Rabadá y Navarro murieron en la cara norte del Eiger (Suiza) el 15 de agosto de 1963 como consecuencia del agotamiento y el frío, después de permanecer varios días de avance y colgados en la pared como consecuencia de las adversas condiciones meteorológicas.

El montañismo sufrió un parón debido a la Guerra Civil porque mientras en Europa se siguió avanzando en España comenzó a repetirse lo que ya se había con anterioridad, por eso la irrupción de Rabadá y Navarro, según comenta Elías a Efe, fue "muy innovadora".

"Empezaron a imaginar que podían ascender paredes que para otra gente eran una locura, algo fuera de toda razón, y además las escalaban. Esa es la clave por la que dieron ese empujón a la escalada", destaca.

El aspecto "creativo e imaginativo" que imprimieron a sus actuaciones en las diferentes paredes que afrontaron fue lo que hizo avanzar el montañismo español.

Para Elías, premio Piolet de Oro a la mejor actividad alpinística de 1995, lo importante de la cordada Rabadá-Navarro no era que escalaran el grado de máxima dificultad que existía entonces sino que "se enfrentaron a esas paredes y no pararon de luchar hasta salir por arriba".

También cree que ambos tienen el reconocimiento que se merecen dentro del mundo de la montaña porque piensa que su sello ha quedado grabado en diferentes cordilleras españolas durante muchos años y que se consideran como escaladas muy difíciles y para las generaciones siguientes se han convertido en"ascensiones de referencia" porque lo que hicieron en esa época era revolucionario e innovador".

Elías, que es director del Equipo Nacional de jóvenes Alpinistas desde 2005, destaca que apenas contaban con medios y "tenían que inventar cosas para adaptarlas a la montaña cuando había otros grandes alpinistas con más apoyo y tecnología".

Entre algunas de las cosas que inventaron está el nudo 'edil' de Rabadá o los pitones que diseñaron "en la carpintería de su amigo Montaner".

El punto culminante de la cordada fue la ascensión en 1962 del Naranjo de Bulnes en lo que califica como "un paso más, escalar una pared remota, muy larga, muy difícil técnicamente y lo consiguieron".

Sobre su fallecimiento en la cara norte del Eiger indica que lo que les había servido en escaladas en España "fue lo que les mató".

"En España eran tan valientes y decididos que se quedaban hasta que salían por arriba. Su experiencia en terreno glaciar era muy escasa pero como también lo era en otros campos y la compensaron con esfuerzo, creatividad y coraje", reflexiona.

El autor del libro "Rabadá y Navarro. La cordada imposible" recuerda que cuando se desencadena la tormenta en el Eiger el resto de cordadas desciende pero ellos no lo hicieron en lo que califica con "un acto de gran valentía pero ciega y eso les acabó matando" porque su capacidad técnica era "más limitada y en lo que se habían metido estaba quizá por encima de sus posibilidades en esas condiciones, porque con buen tiempo hubiesen escalado la ruta sin problemas".

De la misma forma analiza que en los primeros años juntos Navarro sirve de freno a Rabadá pero que después aquel se contagia de la "motivación desmedida" de su compañero y que quizá eso fue otro punto más a tener en cuenta para que murieran.

Para Elías, si hoy vivieran Rabadá y Navarro seguirían haciendo lo mismo, "estarían revolucionando el panorama alpino" y recuerda que el gran alpinismo "sigue siendo lo mismo que cuando Edward Whymper escaló el Cervino en 1886, una cuestión de coraje, valentía y de capacidades humanas".

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