Supercopa: Pepe y Alves, la cara oscura de Real Madrid y Barcelona

  • Pepe y Alves volvieron a cruzarse en el partido de ida de la Supercopa de España. Últimamente, en sus duelos saltan chispas. Al primero se le achaca un juego duro excesivo y al segundo fingimiento de la gravedad del golpe. Representan la cara B de los clásicos Barcelona-Real Madrid.
Jorge Ramírez Orsikowsky

Violencia versus teatro. Pepe contra Dani Alves. Los clásicos de primavera entre los dos grandes del fútbol español, Real Madrid y Barcelona, dejaron también muchos detalles oscuros de aquello que nadie querría ver en un terreno de juego, detalles que volvieron a repetirse en el partido de ida de la Supercopa de España. Por un lado, el juego brusco, ejemplificado en Pepe; por el otro, el fingimiento, en el que destacó Dani Alves. ¿Repetirán en el choque del Camp Nou?

En el Santiago Bernabéu, en el minuto 56, el portugués y el brasileño volvieron a protagonizar una desafortunada acción. Pepe entró con demasiada fuerza a Alves casi en el córner del campo del Barcelona, un lugar donde esa entrada tiene todavía menos sentido. Debió ver la tarjeta amarilla, pero el árbitro no le amonestó.

Alves, por su parte, exageró la gravedad de la acción. Es más, se echó mano a la pierna derecha mientras se retorcía de dolor sobre el césped, pierna que en ningún momento alcanzó el jugador del Real Madrid con su acción. Varios jugadores blancos como Xabi Alonso y Sergio Ramos fueron a echar en cara al barcelonista su fingimiento. Tanto el brasileño como el portugués tienen antecedentes en lo suyo, es más, vivieron un hecho similar la pasada temporada.

Fue en el partido de ida de la Champions. Pepe entró con los tacos por delante al brasileño en una acción en el campo del Barcelona y fue expulsado por ello. Ríos de tinta se han escrito sobre si llegó a dar a Alves o no, si era roja o no, y hay vídeos para todos los gustos en Youtube, pero lo cierto es que la acción no venía a cuento y era peligrosa de por sí. También es cierto que, por suerte, si le dio no lo hizo de lleno, pero el barcelonista se retiró en camilla. Poco después, volvió al campo sin ningún problema.

Las acciones más violentas y desafortunadas de Pepe

Pepe es como el Doctor Jeckyll y Mr Hyde, tiene dos caras futbolísticas. Es un gran jugador, un central capaz de sacar la pelota con criterio y de robarla con habilidad y anticipación. Sin embargo, de vez en cuando se le cruzan los cables sobre el césped para desgracia de aquellos rivales que andan cerca.

El caso más famoso fue cuando pateó a Casquero en el suelo en un Real Madrid-Getafe, imagen que le va a acompañar siempre. Por fortuna, no llegó a pillar bien al azulón, porque si no... Instantes después, también soltó un manotazo a Albín. Hasta Iker Casillas se quedó alucinado con el comportamiento de su compañero y lo sacó del campo para evitar males mayores.

La temporada pasada, por citar otro caso reciente, dejó varias 'perlas' ante el Olympique de Lyon en otro encuentro en el que perdió los papeles con entradas a destiempo. Lisandro salió ileso de milagro. Plantillazo al muslo, salto en el que Pepe le da con la rodilla en la cabeza…

El teatro de Alves

El brasileño es uno de los mejores laterales derechos del mundo, un futbolista con un despliegue físico descomunal y una calidad que para sí querrían 'peloteros' que juegan en posiciones más adelantadas. Pero también tiene su lado negativo: muchos jugadores le acusan de exagerar las faltas que recibe para buscar las tarjetas de sus rivales.

Zaragoza (Ponzio), Espanyol (Callejón)… Varios futbolistas han visto cómo el jugador barcelonista caía como fulminado por un rayo en un forcejeo. Alves es capaz de convertir un ligero manotazo, un roce, en un puñetazo de Mike Tyson. Persigue la amonestación del rival, si es con tarjeta roja mejor. Luego se levanta como si no le hubiera pasado nada. Picardía para unos, un comportamiento vergonzoso para otros.

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