'Tankear' en la NBA, o cómo perder un año jugándoselo todo a una carta

¿Te imaginas que el Real Madrid dijera que este año no quiere ganar para la siguiente temporada tener más opciones de hacerlo? Seguro que a ningún aficionado le haría gracia regalar todos los títulos porque sí. Salvando el hecho de que son dos formatos diferentes, eso es lo que va a pasar en la NBA este año. Varias franquicias han apostado por un proyecto a medio y largo plazo ante la imposibilidad de plantar batalla a los mejores equipos de la liga y, especialmente, ante las previsiones del próximo sorteo de novatos.

Se espera que ese Draft sea tan bueno como el de 2003, cuando debutaron en la liga jugadores que tardarían poco en convertirse en estrellas, como ocurrió con LeBron James, Carmelo Anthony, Dwyane Wade o Chris Bosh. Una generación así se da una vez cada diez años. Si una franquicia lo planifica bien y tiene suerte, en un verano y a cambio de sacrificar una temporada pueden solucionar el futuro del equipo para los siguientes cinco o seis años.

Pero, ¿cómo se prepara un equipo para desperdiciar un año en la NBA? Pues haciendo lo que se conoce como 'tanking', es decir, configurando un equipo perdedor. Para ello suele convenir traspasar a tus jugadores estrella -sobre todo si son veteranos- (como ha hecho por ejemplo Boston Celtics con Kevin Garnett y Paul Pierce). A cambio lo ideal es recibir jugadores de nivel medio y, a ser posible, que cumplan una de las dos siguientes características: que puedan volver a ser traspasados o que tengan un sólo año de contrato.

Y es que la segunda clave para preparar de manera ideal la temporada 2014/2015 es llegar a ella con un amplio margen en el límite salarial, de modo que se pueda intentar firmar a algún agente libre como Kobe Bryant, Paul Pierce, Ray Allen, Dirk Nowitzki o Pau Gasol. Incluso, en caso de ofrecer un proyecto interesante, algunos jugadores como LeBron James o Carmelo Anthony podrían desligarse de sus clubes ese verano sin coste alguno y fichar gratis por quien quisieran.

Equipos como Phoenix Suns, Utah Jazz, Philadelphia 76ers y Charlotte Bobcats están apostando por esta arriesgada apuesta. Es bastante probable que estos cuatro conjuntos sumen pocas victorias esta temporada. Además, tanto Los Angeles Lakers como los Dallas Mavericks tienen este año muchos jugadores, con grandes sueldos, en último año de contrato, por lo que no sería descabellado que alguno de los dos tuviera una plantilla bastante diferente dentro de un año. También existen dos franquicias -Cleveland Cavaliers y Orlando Magic- que pueden decidir sin 'tankear' o no en función de cómo avance esta temporada.

Ambos conjuntos tienen contratos 'no garantizados' (es decir, que el equipo los puede romper antes de una fecha) para el año que viene. Tanto Cleveland como Orlando pueden dejar mucho espacio salarial si no garantiza esos contratos.

Por último, está el caso de Boston Celtics, una franquicia histórica que parece que va a vivir una temporada de barbecho. Tiene un equipo con pocas garantías después de traspasar a Garnett y a Pierce a los Brooklyn Nets. Además, la gran parte de jugadores tienen, al menos, dos años de contrato, por lo que podrían afrontar el verano que viene con un gasto en salarios bastante alto. Todo apunta a que la franquicia del trébol va a intentar traspasar a jugadores 'caros' y con contratos largos para volver a pelear por todo en dos años.