Trappatoni y su pasado ofensivo

  • Giovanni Trapattoni es uno de esos entrenadores que siempre es señalado por un estilo. El "catenaccio" va asociado a su nombre y probablemente será así para siempre. Para muchos, su fútbol es lo mismo que la palabra conservadurismo. Pero hoy, el técnico de Irlanda, se revolvió recordando un pasado más ofensivo.

Juan José Lahuerta

Gdynia (Polonia) 11 jun.- Giovanni Trapattoni es uno de esos entrenadores que siempre es señalado por un estilo. El "catenaccio" va asociado a su nombre y probablemente será así para siempre. Para muchos, su fútbol es lo mismo que la palabra conservadurismo. Pero hoy, el técnico de Irlanda, se revolvió recordando un pasado más ofensivo.

Un día después de perder ante Croacia se sentó delante de los micrófonos tras dirigir a su equipo en un entrenamiento vespertino. A sus 73 años, "el abuelo" de la Eurocopa se mantiene bien. Está ágil pese a su edad, sólo delatada por una cabellera poblada de canas. Y, tal vez, por una voz débil pero clara con la que contestó, en un inglés básico, las preguntas de los periodistas.

Entonces, el hombre del "catenaccio" alzó la voz para rebelarse contra un sistema del que muchos le consideran el gran exponente. Cuando se hablaba de la ausencia de un referente ofensivo en España, habló claro. "Yo nunca he jugado sin delantero. Tengo fama de ser un técnico defensivo, pero en Italia llegué a jugar con Platini, Rossi, Bettega y Boniek", dijo.

"¡Tengo récord de goles a favor y de menos tantos recibidos. En Irlanda también juego con cuatro hombres ofensivos: Duff, McGeady, Doyle y Keane. ¿Eso es ser defensivo?", sentenció.

Aquellos nombres que recitó, con Platini a la cabeza, eran los de un gran equipo, el Juventus de finales de los 70 y principios de los 80. Con él ganó todos los títulos posibles (una Copa de Europa, una UEFA, una Recopa, una Intercontinental, seis Ligas y dos copas italianas) Han pasado tres décadas de aquello y Trapattoni se reivindica.

Suya fue una frase que le hizo famoso y que tal vez le retrató para siempre: Su estilo estaba basado en "un ataque implacable apoyado en una defensa de hierro". Ahora los tiempos cambian y parece quedarse con el final de la cita, la del ataque implacable.

España se enfrentó a Italia esperando un cambio de estilo de Cesare Prandelli, amante del fútbol de buen gusto que tanto se lleva en estos tiempos. Esperaba un regreso al "catenaccio" y se equivocó.

El conjunto transalpino sorprendió con un fútbol basado en una defensa correcta y en un ataque atrevido. Ahora, Trappatoni, de quien se espera otro "catenaccio", se ha revuelto contra aquello que lo hizo famoso. ¿Será verdad o de nuevo un italiano engañará a la Roja"? En tres días, la solución. EFE.

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