Poco se podía imaginar Justin Hoyte que la entrada más dura de un partido no se la iba a hacer un rival, sino un seguidor que saltó desde la grada. Fue en los minutos de descuento del Middlesbrough - Sunderland de la quinta ronda de la copa inglesa cuando el defensa local vio cómo un aficionado intentaba hacerle una dura entrada por detrás.
No está claro si se arrepintió en el último segundo, se resbaló o decidió sólo asustar al futbolista, pero el seguidor patinó por el césped y no llegó a impactar en la pierna del jugador, que, eso sí, se llevó un buen susto. Por cierto, el Sunderland terminó llevándose el partido por 1-2 y el pase a la siguiente ronda copera.
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