Alicante-Murcia, 1 jun.- El Hércules, con la permanencia matemática en Segunda División conseguida desde hace una semana, puede convertirse en verdugo del Murcia, que está obligado a ganar en Alicante y esperar a que el Mirandés no lo haga en Córdoba para evitar el descenso.
El encuentro entre alicantinos y murcianos estará marcado, además, por las dudas que ha generado la retirada del partido de las casas de apuestas sobre la existencia de un hipotético amaño que favorecería el triunfo del conjunto murciano.
La sombra de la sospecha deja en un situación complicada al Hércules y, en especial, a su técnico Quique Hernández, que medita la posibilidad de dar entrada en el once titular, o bien durante el partido, a futbolistas que han disfrutado de menos minutos durante la temporada.
Las únicas bajas confirmadas en el conjunto alicantino son las del extremo brasileño Gilvan Gomes, por lesión; y las de Alberto Escassi y el defensa uruguayo Leandro Cabrera por sanción.
Durante la semana, tanto jugadores como técnicos del Hércules han expresado lo difícil que es disputar un partido en el que el rival puede descender de categoría, pero han asegurado que van a salir a por la victoria para despedirse de su afición esta temporada con un triunfo.
El Murcia, con el ánimo de un equipo prácticamente descendido, apurará las escasas posibilidades que todavía le quedan para mantenerse en la Liga Adelante.
Una sola victoria en doce partidos han metido al conjunto grana en una situación desesperada, cuando en el tramo inicial de la temporada se pensaba que era un bloque con serias opciones de pelear por el ascenso.
Con 41 puntos sumados en 40 jornadas, el cuadro dirigido por Onésimo Sánchez se encuentra al borde de la Segunda B, pues está a cinco puntos de la zona de permanencia cuando faltan seis en juego.
Por lo tanto, tras perder el pasado domingo por 0-2 ante la Ponferradina en el estadio Nueva Condomina, el Murcia está obligado a ganar sus dos partidos y que fallen sus tres rivales directos en la pelea por la permanencia, que son el Mirandés, que es el que le aventaja en cinco puntos; el Racing de Santander, que tiene uno más que el cuadro grana; y el Huesca, que está igualado a puntos, pero tiene mejor diferencia de goles.
El entrenador grana lo tiene claro y ha dicho públicamente que "hay que trabajar hasta el final y acabar la temporada con dignidad", aunque es consciente de que lo normal es que se consume el descenso.
Onésimo, quien ha dicho que el principal problema del equipo es "la falta de gol", tratará de sumar tres puntos en el estadio José Rico Pérez en un duelo de rivalidad histórica y frente a un rival ya salvado. Por ello, el técnico vallisoletano ha dicho que "se debe notar desde el principio quién es el equipo que se juega algo".
Pese a la dificultad, Onésimo ha pedido a sus jugadores fe. "Hay que seguir creyendo y saber que hasta el final siempre puede darse cualquier resultado", ha expuesto.
Para este encuentro, el cuadro murcianista tiene muchas bajas, pues a las de los lesionados Mario Marín, José Manuel Catalá y Jonatan Gómez, se suman otras como las del sancionado Óscar Sánchez, y las de Emilio Sánchez y Cristian Garcían, quienes arrastran molestias físicas.
Esto ha hecho que el técnico cite a varios jugadores del filial como Eddy Silvestre, Borja Gil, Carlos Pifarré y Miguel Marín 'Migue'. Onésimo ha convocado a 19 jugadores, uno de los cuales será descartado antes del choque.
Alineaciones probables:
Hércules: Falcón; Cortés, Pamarot, Sergio Díaz, Peña; Paglialunga, Edu Bedia, Sardinero, Nacho González; Braulio y Portillo.
Murcia: Javi Jiménez; Molinero, Dos Santos, Jorge García, Tagliafico; Daniel Toribio, Matilla, Miguel Albiol, Nico Martínez; Saúl y Kike García.
Árbitro: López Acera (Comité Extremeño).
Hora: 18.00. EFE
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