Villarreal (Castellón), 8 jun.- Un millar de aficionados saltó al terreno de juego para festejar el ascenso del Villarreal a Primera División a la conclusión del encuentro ante el Almería, que los villarrealenses ganaron por 1-0.
Tras el pitido final, el césped fue invadido por los seguidores, que se abrazaron con los futbolistas.
A la fiesta se sumaron el presidente del Villarreal, Fernando Roig, y el entrenador, Marcelino García Toral, que no había podido estar en el banquillo, al encontrase sancionado.
Los jugadores se retiraron, pero, posteriormente, volvieron al terreno de juego y recibieron nuevamente los aplausos de sus seguidores.
Antes y nada más concluir el encuentro, los jugadores del Almería se acercaron al gol norte del campo de El Madrigal para agradecer a los 2.500 seguidores de su equipo el apoyo recibido en este encuentro.
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