EL BANCO DE ESPAÑA VE “DESEABLE” QUE LOS SALARIOS NO SUBAN EN LA MISMA MEDIDA QUE EL IPC, PARA FACILITAR UN “AJUSTE MÁS EFICIENTE” DE LA ECONOMÍA ESPAÑOLA

- El empleo “habría retornado” a tasas de crecimiento similares al primer trimestre de 2016. El Banco de España señala que “sería deseable mantener la tendencia hacia un menor grado de indexación” de los contratos y los acuerdos salariales a la inflación, para facilitar un “ajuste más eficiente” de la economía española.
En un documento publicado este viernes, titulado ‘La evolución del empleo y del paro en el primer trimestre de 2017, según la Encuesta de Población Activa’, el organismo señala que los indicadores de empleo referidos al primer trimestre “indicarían que el empleo habría retornado a tasas de crecimiento similares a las observadas en los tres primeros trimestres de 2016, tras la moderación apreciada a finales de año”, en un contexto de “leve aceleración” en el crecimiento del PIB, que avanzó un 0,8% en el primer trimestre del año, y de prolongación de la moderación salarial.
El Banco de España analiza la evolución salarial en 2016 y las perspectivas para 2017, y en este sentido apunta que el año pasado se mantuvieron las pautas de moderación salarial en un contexto de inflación “muy reducida, e incluso negativa”.
El organismo admite que el repunte de la inflación a finales de 2016, que se ha prolongado en los meses transcurridos de 2017, relacionado con las alzas en el precio del petróleo, llevó a “una caída de los salarios reales” en la parte final del pasado año.
En conjunto, en el período transcurrido desde 2014 la evolución de los salarios reales ha estado “en línea con el reducido crecimiento de la productividad”, que se incrementó un 0,2% en el promedio de estos tres años.
En el documento, el Banco de España observa que los convenios de nueva firma en 2016 mantuvieron un comportamiento similar a las revisiones de convenios firmadas en años anteriores, con un alza del 1%, “sin que la progresiva mejoría del mercado de trabajo se tradujera en mayores presiones al alza de los salarios”.
Mientras, los convenios registrados hasta marzo avanzan un “leve repunte” de los salarios para este año, con un incremento salarial medio del 1,3%.
No obstante, el organismo destaca que en el caso de los convenios de nueva firma el incremento medio se sitúa en el 1,6%, “en un contexto de ausencia de un acuerdo entre los agentes sociales que pueda marcar las directrices fundamentales de la negociación”.
IMPACTO DE LA INFLACIÓN
Por otra parte, el Banco de España analiza el impacto del repunte reciente de la inflación sobre la negociación colectiva, y destaca que la mayor parte de los convenios colectivos incluían cláusulas de salvaguarda frente a la inflación, lo que “aumentaba la inercia nominal de los salarios y repercutía negativamente en la competitividad de las empresas españolas ante perturbaciones alcistas en los precios del petróleo”.
Sin embargo, este tipo de cláusula “ha reducido mucho su presencia”, hasta afectar al 20% de los trabajadores en 2016, desde cifras en el entorno del 75% en los años previos a la crisis, indica el supervisor.
De cara al futuro, “sería deseable mantener la tendencia hacia un menor grado de indexación de los contratos, incluidos los acuerdos salariales, para facilitar un ajuste más eficiente de la economía”, considera.
Además, llama la atención respecto al incremento del precio de la energía en la inflación en la economía española, registrando niveles “relativamente elevados” y si se produjera un “exceso de inercia” a la hora de determinar los precios y los salarios, se podrían producir pérdidas de competitividad.
Finalmente, el organismo precisa que “se espera que la creación de empleo mantenga tasas relativamente elevadas en el futuro próximo, aunque decrecientes”, y que, dado que los nuevos empleados que se incorporan al mercado laboral lo hacen con sueldos más bajos, “este componente seguirá contribuyendo a moderar el crecimiento medio de la remuneración en los próximos años”.

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