Agricultura rescindirá alquileres y bajará gasto en energía, papel y teléfono

Madrid, 9 oct.- El Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente rescindirá cuatro contratos de arrendamiento para ahorrar 9,9 millones, primará la edición de obras digitales frente al papel y recortará en material de oficina, energía, teléfono y correo por la austeridad presupuestaria.

Así lo ha explicado hoy el subsecretario de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Jaime Haddad, en su comparecencia en Comisión de Agricultura del Congreso para informar sobre el proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado del departamento para 2013.

Haddad ha destacado también la caída del gasto de personal al no sustituirse a los funcionarios que se jubilarán.

Austeridad, racionalidad en el gasto y reducción del déficit serán algunas de las constantes de las cuentas, según ha precisado.

Sobre la supresión de los arrendamiento, ha apuntado que se enmarca en un plan de reubicación de unidades para lograr más eficacia, objetivo en el que se enmarca la finalización de las obras proyectadas en un edificio de Madrid.

Tras aludir a la "herencia" que se encontró el PP, que fue de "un país hundido y en caída libre", ha insistido en que son unas cuentas "necesariamente austeras" debido "al desajuste en las cuentas públicas; la austeridad no es una opción, sino una necesidad".

El Ministerio tendrá un presupuesto consolidado de 9.489,4 millones, 7.661,87 para "Agricultura, pesca y alimentación" y un total de 6.850 millones corresponden a fondos europeos.

Entre los gastos, invertirán 1.744,86 millones en política de infraestructuras, transferirán 4,3 millones a las comunidades autónomas para sufragar el coste de los avales concedidos por Saeca para la obtención de préstamos a titulares de explotaciones ganaderas y contarán con 1,79 millones para paliar efectos de sequía o epizootías y con 5,24 millones para la Agencia del Aceite (AAO).

En cuanto a subvenciones, gastará 2,75 millones en apoyo de organismos internacionales, 1,16 millones en organizaciones agrarias y otras agroalimentarias y ambientales; 3,86 millones en ayudas a entidades de utilidad pública -como Fundaciones y asociaciones para fines de interés social- y 425.910 euros para sindicatos agroalimentarios y medioambientales.

Por su parte, la secretaria general de Agricultura y Alimentación, Isabel García Tejerina, detalló en su intervención que su departamento tendrá 7.500,5 millones de euros -el 78,3 % del gasto del Ministerio- un 8,67 % menos respecto al año anterior.

García Tejerina ha afirmado que "son los únicos presupuestos posibles para recuperar la credibilidad internacional", "se va a pagar lo que ustedes han gastado", en referencia al PSOE.

Desde el PSOE, Alejandro Alonso ha acusado al Ministerio de ser "el campeón de los recortes", tras "una reducción exageradísima" de las aportaciones del Estado, que cifra en un 25,4 %, "casi el triple de la media" de otros departamentos.

"Han hecho del Ministerio, que decían que iba a ser prioritario, una mera gestoría de los fondos de la UE", ha remarcado.

El diputado socialista Felipe Sicilia ha planteado que España perderá 450 millones de euros en fondos europeos, al recortar las partidas a este capítulo y ser ayudas cofinanciadas.

"Estos presupuestos son un despropósito", porque se perderán fondos europeos al recortar las partidas cofinanciadas del desarrollo rural, ha insistido en este sentido Laia Ortiz (Izquierda Plural), tras criticar que el gasto del ministerio cae el 70 % desde 2009.

El portavoz del PP en la Comisión de Agricultura del Congreso de los Diputados, José Cruz Pérez Lapazarán, ha justificado la necesidad de "tomar medidas extraordinarias", porque "sabemos quien ha dejado la macabra cuenta de resultados" -en referencia al Gobierno anterior- y deben contabilizarse ahora correcciones financieras de la anterior etapa por 128 millones de euros.

La diputada del BNG Olaia Fernández Davila ha planteado que los presupuestos no recogen ayudas al sector para hacer frente a adversidades climáticas y "especulativas", especialmente las que afectan a la subida de los piensos y los bajos precios del lácteo.