Panamá, 5 abr.- Con 50 autobuses, el Municipio de Panamá aprobó hoy un plan de emergencia para aliviar el caos en el transporte público masivo de la capital tras la retirada de los llamados "diablos rojos" y la insuficiencia del sistema Metro Bus para cubrir la demanda, informó la Alcaldía en un comunicado.
La fuente precisa que con 16 votos a favor y uno en contra, el pleno del Concejo Municipal de Panamá aprobó en sesión extraordinaria la medida de emergencia propuesta por la alcaldesa Roxana Méndez, "que busca disminuir la problemática del transporte público en el Distrito Capital".
La iniciativa de Méndez "radica en poner a disposición un servicio de transporte de pasajeros de forma gratuita y de manera temporal por diez días laborales que ayudarán con la movilización de aproximadamente 71.520 pasajeros", detalla.
Son 50 autobuses, de estos, 32 con capacidad de 46 pasajeros y 18 para 30 personas que prestarán el servicio en horario de lunes a viernes con dos vueltas completas en la mañana de 5.00 a 8.00 hora local (10.00 a 13.00 GMT) y dos vueltas completas de 16.00 a 19.00 hora local (21.00 a 00.00 GMT).
La Empresa INTERBUS, S.A. estará a cargo del servicio de transporte, que al ayuntamiento le costará 250.000 dólares, indica la fuente, que no precisa cuándo comenzará a operar.
No obstante, especifica que el acuerdo se encuentra en un periodo de ajustes para "recibir más aportes y que se pueda perfeccionar para llegar a todos los sectores del distrito".
De momento se ha precisado que los autobuses municipales partirán desde ocho puntos en la periferia de la capital panameña, donde se dan las mayores dificultades para miles de habitantes que usan el transporte masivo de pasajeros a diario.
La alcaldesa Méndez recalcó que es un plan de emergencia, que aportará una solución temporal al cambio actual que ha tenido el sistema de transporte público, que enfrenta una transición traumática temporal; "por eso nadie antes se había atrevido hacer un cambio en el sistema de transporte", advirtió.
El pasado 15 de marzo se retiró el viejo sistema de transporte colectivo, con 40 años de antigüedad, con autobuses coloridos llamados los "diablos rojos", pero el sistema Metro Bus, que opera la empresa colombiana Mi Bus, con 1.200 autobuses nuevos con mayor capacidad, se ha visto rebasado por la demanda en las "horas pico".
La empresa suramericana ya ha sido multada por no cumplir con los compromisos de atención al público e itinerario de 15 minutos entre autobuses incluidos en el contrato de concesión, pese a que su uso es prepagado por los panameños obligatoriamente y además reciben un subsidio del Estado.
La gestión financiera del sistema con las tarjetas electrónicas prepagadas la lleva la empresa chilena Sonda, que también enfrenta quejas por la falta de sitios de recarga de los dispositivos o la caída de la red que utiliza, lo que tiene enojados a los panameños.
El Gobierno panameño adelanta un plan de reordenamiento vial en la capital, que incluyó la salida paulatina de los "diablos rojos" y la entrada de los nuevos autobuses en 2010, paralelamente a la construcción de la primera línea del Metro, que se espera comience a operar a finales de febrero de 2014.
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