Madrid, 29 abr.- El consejero delegado del Grupo Santander, Alfredo Sáenz, renunció hoy de forma voluntaria a este cargo, en el que le sustituirá Javier Marín Romano, así como al de vicepresidente del grupo español, informó la entidad.
La renuncia se produjo después de que el Tribunal Supremo español confirmara el pasado 19 de abril una sentencia en la que anulaba parcialmente el indulto que le había sido concedido a Sáenz, lo que le permitiría recurrir en amparo al Tribunal Constitucional.
Alfredo Sáenz fue condenado en marzo de 2011 por el Supremo por un delito de acusación falsa contra unos deudores de Banesto, entidad que presidió tras ser intervenida en 1993.
Sáenz se va del primer grupo financiero español antes de que el Banco de España se pronuncie sobre su honorabilidad, algo necesario para que pudiera seguir en el cargo.
El nuevo consejero delegado del Grupo Santander, Javier Marín Romano, se incorporó a la entidad en 1991 y hasta la fecha era director general del banco y responsable de la División Global de Seguros, Gestión de Activos y Banca Privada.
Sáenz se había incorporado al Grupo Santander en 1994, con motivo de la adquisición de Banesto, y ejerció el cargo de presidente de dicha entidad hasta 2002, en que fue nombrado vicepresidente y consejero delegado de Banco Santander.
En el periodo en el que Alfredo Sáenz ha desempeñado sus funciones como consejero delegado, según la entidad, el Grupo Santander "ha casi cuadruplicado su tamaño", pasando de unos activos de 358.138 millones de euros en 2001 a 1,25 billones de euros en 2012 y de unos fondos gestionados de 453.384 millones de euros (2001) a 1,39 billones de euros (2012).
También se ha consolidado como primer banco de la zona euro por capitalización bursátil, añadió el grupo bancario.
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