Barroso pide a Eslovaquia que ratifique la ampliación del fondo de rescate

Bruselas, 5 oct.- El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, hizo hoy un llamamiento a Eslovaquia para que ratifique la ampliación del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF), un voto que no está asegurado debido a la oposición de uno de los partidos gubernamentales.

"Aprovecho la ocasión para pedir a Eslovaquia su apoyo en esta decisión", afirmó Barroso en una rueda de prensa tras reunirse con la canciller alemana, Angela Merkel.

El partido gubernamental eslovaco Libertad y Solidaridad (SaS) no apoya la reforma del FEEF, que debe ampliar sus competencias para poder actuar de forma preventiva, dar líneas de crédito a gobiernos para recapitalizar bancos e intervenir en el mercado secundario.

Eslovaquia será el último país de los 17 de la eurozona en votar, el próximo día 11, sobre la ampliación del fondo de rescate para elevar su capacidad efectiva de préstamo a 440.000 millones de euros.

Por otro lado, Barroso agradeció a Alemania la reciente aprobación en su parlamento de la ampliación del FEEF, acordada el pasado 21 de julio, y dijo que se trata de "un importante gesto en apoyo del euro".

Entre los logros recientes de la CE, Barroso también mencionó la propuesta para imponer una tasa a las transacciones financieras y aseguró que tanto Merkel como él estuvieron de acuerdo en que es el momento de impulsar esta medida a escala internacional.

"Presionaremos en el G20 de Cannes hacia una tasa financiera global", sostuvo y recordó que la prioridad sigue siendo "el refuerzo de la reglas de financiación y de supervisión".

Barroso dijo que la UE es consciente de que se encuentra en una encrucijada y aseguró que la única manera de recuperar "la confianza en nuestra capacidad común para actuar" es más Europa, más compromisos y más liderazgo de la UE.

"A través de una renovación podremos asegurar que Europa cuenta en el mundo y que es capaz de defender sus intereses", indicó y añadió que se necesita potenciar el crecimiento, elevar la competitividad y fomentar el empleo, ya que sólo a través de eso Europa será tomada en serio en el mundo desde el punto de vista económico y político.

Barroso reconoció que algunas de las medidas y reformas son dolorosas, pero necesarias, y citó a Alemania como modelo de comportamiento para lograr unas finanzas sólidas y afirmó que su competitividad, crecimiento y empleo son la envidia de otros muchos países.

"Sólo con coordinación a escala europea podremos alcanzar nuestros objetivos", recalcó y aclaró que cuando las decisiones de uno pueden tener efecto en todos los demás es normal que se discutan.

Descartó no obstante que se necesite un nuevo gobierno económico sólo para la eurozona ya que, en su opinión, es incoherente con el mercado europeo y con la perspectiva de que todos los estados miembros pasen a formar parte del euro.

"La CE es el gobierno económico de la UE. No necesitamos más gobiernos", zanjó.