Bruselas, 19 oct.- La empresa belga de telecomunicaciones Belgacom ha admitido por primera vez después de denunciar una intrusión en sus servidores informáticos que los datos de sus clientes podrían haber sido pirateados.
La empresa belga anunció en septiembre haber sido víctima de espionaje y a principios de este mes aseguró que los datos personales de sus clientes no resultaron afectados por las intrusiones en su sistema.
El operador belga confirmó al diario "Le Soir" que el router afectado es de su área de negocio BICS, la filial de Belgacom que se encarga del servicio de tráfico y de comunicaciones telefónicas internacionales.
"La investigación en marcha deberá aclarar si hay datos de clientes afectados", señalaron fuentes de la empresa al periódico, después de que indicara el jueves que controles "en profundidad" han permitido detectar "irregularidades" en el router de BICS.
No obstante, hasta el momento nada permite afirmar que el router pirateado y las intrusiones informáticas tienen el mismo origen, algo que debe determinar la investigación de la fiscalía.
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