Londres, 15 nov.- La petrolera británica BP confirmó hoy que negocia con las autoridades estadounidenses un posible acuerdo para zanjar demandas derivadas de la explosión y vertido de petróleo desde una de sus plataformas en el Golfo de México en 2010.
En un comunicado, la empresa precisa que está en conversaciones con el departamento de Justicia y la Comisión de canjes y valores, el supervisor financiero, si bien "aún no se ha llegado a ningún acuerdo definitivo".
BP señala que estas negociaciones, que buscarían acordar una suma en concepto de multa a cambio de evitar futuras querellas, no cubren demandas civiles, por lo que se ceñirían a penales y financieras.
Según los medios británicos, la petrolera estaría dispuesta a declararse culpable de algún tipo de delito de mala conducta en términos penales para poner fin al contencioso, lo que podría comportarle una sanción de más de mil millones de dólares.
Además de las demandas penales a nivel estatal, la empresa británica afronta otras de tipo civil y medioambiental en los estados estadounidenses afectados.
La explosión de la plataforma Deepwater Horizon de BP el 20 de abril de 2010 causó la muerte de 11 trabajadores y un desastre medioambiental en el Golfo de México.
Para hacer frente a los costes derivados del suceso, la petrolera lleva a cabo un proceso de desinversión, sobre todo de sus activos en Estados Unidos, para recaudar un total de 38.000 millones de dólares.
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