Cataluña, a dos décimas de rebasar el déficit de 2013 tras años de descensos

Barcelona, 17 ene.- Cataluña corre el riesgo de romper la dinámica de reducción paulatina del déficit que inició en 2011, ya que a falta de conocer los datos de los últimos dos meses de 2014, su déficit equivale al 1,76 % del PIB, solo dos décimas por debajo del registrado al cierre de 2013, que fue del 1,95 %.

Los últimos datos oficiales disponibles son los de octubre, cuando la Generalitat acumulaba un desfase entre ingresos y gastos que alcanzaba los 3.529 millones de euros.

Cataluña, como otras comunidades autónomas, hace meses que superó el objetivo permitido para 2014, que es del 1 % del PIB, y ahora se encamina hacia el 2 %, ya que el déficit suele dispararse en la ultima parte del año y esto podría llevarla a doblar el límite permitido para el ejercicio.

Desde hace meses, el consejero de Economía, Andreu Mas-Colell, resalta que el esfuerzo hecho por la Generalitat en los últimos años ha permitido ir reduciendo poco a poco el déficit, y asegura que ya no se puede recortar más, sino que es necesario buscar ingresos adicionales.

Cuando CiU recuperó el poder, tras las elecciones de noviembre de 2010, denunció que el tripartito le dejaba unas finanzas maltrechas, y estimó que ese año el déficit había llegado hasta el 4,53 % del PIB.

A partir de ahí, el gobierno catalán de Artur Mas tomó posesión a finales de diciembre y, gracias a una formula que combinaba recortes del gasto con aumento de la presión fiscal, redujo el déficit al 4,12 % del PIB en 2011, al 2,25 % en 2012 y al 1,95 % en 2013, unos porcentajes que incumplieron año a año los límites marcados por el Gobierno, pero que evidenciaban una reducción paulatina del déficit.

Esa reducción del déficit supone que, entre 2010 y 2014, la Generalitat ha drenado el déficit en 7.660 millones de euros.

Sin embargo, los datos hasta octubre revelan que Cataluña puede superar ese 1,95 % del PIB de déficit registrado en 2013, ya que a estas alturas del año pasado, Cataluña registraba un déficit del 1,37 % del PIB, equivalente a 2.707 millones de euros, lo que supone 822 millones menos que ahora.

Por otra parte, la Generalitat ya tiene disponibles los datos de ejecución presupuestaria hasta el 30 de noviembre, que concluyen que Cataluña, a falta de un mes para cerrar el ejercicio, tenía un déficit de 3.543,9 millones, 152,5 millones más que en octubre, según los datos de la Generalitat.

No obstante, los datos de noviembre todavía no son oficiales, ya que aún deben pasar el filtro de la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE), dependiente del ministerio de Hacienda, que incorpora los ajustes a los que obliga el Sistema Europeo de Cuentas Nacionales y Regionales (SEC).

En cualquier caso, las estimaciones de la Generalitat son útiles para ver la evolución de los ingresos y de los gastos de la administración catalana.

Los ingresos no financieros de la Generalitat hasta noviembre fueron de 17.467,7 millones, un 3,5 % menos que en el mismo período del año anterior, mientras que los gastos han crecido un 3 %, hasta los 21.011,6 millones.

En el plano de los ingresos, la Generalitat asegura que los ingresos obtenidos por venta de edificios sumaban hasta noviembre 267,9 millones, un 25,9 % de lo previsto, y que en cuanto a los ingresos patrimoniales, esto es las privatizaciones previstas, "no se están llevando a cabo las operaciones incluidas en las previsiones iniciales", admite.

Una explicación de que no se hayan obtenido ingresos por esa vía es que la Generalitat ha fracasado en su intento de traspasar en 2014 al Área Metropolitana de Barcelona la gestión de las depuradoras que dan servicio a Barcelona y alrededores por unos 800 millones, una operación que implicaba la titulización de un porcentaje del canon del agua.

Una buena noticia para la Generalitat, en cambio, es que el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales casi ha conseguido el importe anual previsto y presenta un crecimiento del 30,1 %, gracias a que ha crecido la venta de viviendas de segunda mano.