CCG acuerda iniciar nueva etapa basada en respeto de la soberanía de estados

Doha, 9 dic.- Los países del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) acordaron hoy iniciar una nueva etapa basada en "la solidaridad" entre ellos y el "respeto total" a la soberanía de los estados y la no injerencia en sus asuntos internos.

La llamada "Declaración de Doha", leída durante la clausura de la cumbre del CCG celebrada en la capital catarí, señala la "importancia de iniciar un nuevo periodo en el trabajo del Consejo basado en la solidaridad como práctica y como método".

Además, resalta la soberanía de los países y la necesidad del trabajo conjunto en todos los ámbitos.

Los países del CCG (Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Catar, Baréin, Kuwait y Omán) protagonizaron hace meses una crisis sin procedentes por discrepancias sobre la política a seguir con los Hermanos Musulmanes, a los que apoya el régimen catarí.

El mes pasado, esos países allanaron el camino hacia la reconciliación en una cumbre extraordinaria celebrada en Riad, en la que Arabia Saudí, Emiratos y Baréin acordaron la vuelta de sus embajadores a Catar, que habían sido retirados en marzo pasado.

En el comunicado final difundido hoy en la cumbre, estos países expresaron el "apoyo total" al presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, y su plan de transición política, y alabaron el "destacado papel regional de Egipto".

Esa declaración supone un cambio en la actitud de Catar, que hasta hace poco criticaba duramente a Al Sisi tras el golpe de Estado que derrocó al presidente islamista Mohamed Mursi el 3 de julio de 2013.

Por otra parte, los jefes de Estado del CCG también dieron luz verde al inicio de una policía unificada, con sede en Abu Dabi, y a la formación de una fuerza marítima conjunta, con sede en Baréin.

Esas medidas fueron tomadas después de que en 2012 el CCG acordó en una cumbre en Kuwait formar una comandancia militar unificada ante los desafíos de seguridad.

El Consejo de Cooperación del Golfo condenó hoy "el terrorismo" y abogó por la "convivencia" frente al auge del grupo yihadista Estado Islámico (EI) en la región.

Pidió una solución política en Siria, el cese de la violencia en Libia y el fin del control de las instituciones yemeníes por parte del movimiento rebelde chií de los hutíes.

Con el objetivo de avanzar en la integración económica, los países del Golfo anunciaron la aprobación de una serie de proyectos encaminados a la unión aduanera, algunos de ellos relacionados con la circulación de alimentos.

Insistieron en la importancia de petróleo y el gas, así como en su "explotación de forma que se garantice la seguridad, el desarrollo y la prosperidad de sus pueblos", después de que los precios de estos hidrocarburos hayan caído con fuerza en los últimos meses.

Asimismo, se comprometieron a seguir estudiando las formas de unión entre esos estados y a tomar las medidas necesarias para construir un mercado común y un ferrocarril que pase por su territorio a partir de 2018.

Sobre Irán, el CCG insistió en que la zona del golfo Pérsico esté libre de armas nucleares y volvieron a rechazar la ocupación iraní de tres islas cuya soberanía reclama Emiratos Árabes Unidos.