CCOO, contrario a que el Banco de España decida la honorabilidad de banqueros

  • El sindicato Comfia-CCOO se muestra contrario a que el Banco de España sea quien decida la honorabilidad de los ejecutivos de las cajas de ahorros condenados por la Justicia y se muestra a favor de que por esta razón dejen de ser honorables.

Madrid, 4 mar.- El sindicato Comfia-CCOO se muestra contrario a que el Banco de España sea quien decida la honorabilidad de los ejecutivos de las cajas de ahorros condenados por la Justicia y se muestra a favor de que por esta razón dejen de ser honorables.

Según la normativa actual, cuando un directivo de una entidad financiera es condenado por la Justicia, se entiende que pierde la honorabilidad y no puede seguir ejerciendo sus funciones bancarias, algo que se modificaría en la nueva ley de cajas, en la que el Gobierno deja esta decisión al Banco de España.

En un comunicado, Comfia-CCOO ha explicado que ésta es una de las alegaciones que ha presentado ante el Ministerio de Economía relativas al anteproyecto de Ley de Cajas de Ahorros y Fundaciones Bancarias, elevado a finales de enero a consulta pública.

En concreto, el sindicato ve "inconveniente dejar a la discrecionalidad del Banco de España los requerimientos de honorabilidad exigidos a los miembros de consejos de cajas y fundaciones bancarias", y propone "mantener los criterios anteriores a la nueva normativa prevista para estas entidades".

La nueva norma propuesta por el Gobierno, consensuada con Bruselas dentro de las condiciones por las que España pidió ayuda financiera, previsiblemente obligará a las cajas a convertirse en fundaciones bancarias antes de finales de 2014.

También establecerá que las fundaciones bancarias estarán dirigidas por un patronato que tendrá un máximo de 20 miembros, que no podrán sentarse en el consejo de la entidad participada.

Además, cuanto mayor sea la participación de una fundación en un banco, mayores serán los requisitos.

Así, las fundaciones bancarias que controlen más de un 30 % de una entidad deberán suscribir un protocolo de gestión que será aprobado por el Banco de España y tendrán que presentar un plan financiero.

Además, sus asambleas generales no podrán tener más de 150 miembros, de los que entre un 50 y un 60 % serán representantes de los impositores, con la mitad de ellos grandes impositores; y el resto, de entidades fundadoras y destinatarios de la Obra Social.

Sus consejos de administración estarán formados por entre 13 y 17 miembros, de los que la mayoría deberán ser independientes, es decir, no podrán formar parte de la asamblea de la caja.

La condición es que cumplan criterios de honorabilidad y cuenten con experiencia en el sector.

En este sentido, Comfia-CCOO ve "inadecuado" que la composición de las comisiones de inversiones y de retribuciones, delegadas del consejo de administración, estén limitadas a un número muy reducido de miembros y propone impedir que forme parte de dichas comisiones cualquier administrador y/o directivo afectado directamente por las decisiones tomadas allí.

En cuanto a la configuración de los grupos en los órganos de gobierno, pide eliminar la recuperación del "voto censitario" para la representación de los impositores y dice que se deberían fijar mínimos de representación para todos los grupos, no sólo a éste.

Por último, pide que en la composición del patronato se haga una referencia expresa a la presencia de patronos a propuesta de las organizaciones que componen los consejos Económicos y Sociales de los ámbitos de actuación de la fundación bancaria y que se incluya la presencia de un representante de los empleados de la fundación y del banco del que es propietaria.

También solicita que la incompatibilidad de la condición de patrono con el desempeño de cargos no solo se refiera a cargos de administración, también de dirección.

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