La Corte de Justicia de la República ha declarado culpable por actuar negligentemente a Christine Lagarde, directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) y antigua ministra de Economía francesa. El motivo es el dinero público destinado a costear la indemnización al empresario Bernard Tapie. No se le impone ninguna pena, pese al veredicto. Esta decisión tampoco aparecerá en los antecedentes de la exministra.
El caso Tapie, como también se conoce a este proceso, investigaba la concesión de una indemnización por valor de 403 millones de euros al empresario, obtenida tras el veredicto de un tribunal privado. En los años en los que Lagarde era ministra el Elíseo estaba ocupado por Sarkozy, amigo de Tapie.
Bernard Tapie vendió Adidas al banco semipúblico Crédit Lyonnais en 1994 para incorporarse como ministro al ejecutivo liderado entonces por François Mitterrand, sin que hubiese un conflicto de intereses.Tapie era amigo de Sarkozy
Un año después, el Lyonnais vendió la totalidad de la empresa al empresario Robert Louis-Dreyfus, por un precio muy superior al pactado con Tapie, lo que supuso la apertura de dos décadas de juicios debido a la plusvalía con la que se hizo el banco y que indignó a Bernard Tapie. Los tribunales ordinarios habían denegado la compensación millonaria al empresario.
Durante el mandato de Sarkozy, el caso se resolvió a favor del empresario, concediéndole los 403 millones mencionados anteriormente, que venían del erario público. El Gobierno determinó que el caso se resolvería en un tribunal de arbitraje privado. Un tribunal al que dio luz verde Lagarde. Tapie fue condenado a devolver el dinero en 2015.
Los jueces de la Corte de Justicia de la República acusan a Lagarde de promover el arbitraje privado y evitar el proceso de la justicia ordinaria, a pesar de las advertencias existentes en contra de esa decisión. También se la acusa de no haber presentado ningún recurso para anular la decisión del tribunal privado y evitar que se llevase esa ingente cantidad de dinero.
Que Tapie fuese amigo de Sarkozy, y que apoyase su candidatura para llegar al Elíseo en 2007, hace pensar que tal vez el Gobierno galo facilitó que el caso fuese derivado a un tribunal privado. Lagarde recurrirá la sentencia
En el peor de los casos, Christine Lagarde se enfrentaba a la posibilidad de ser condenada a un año de prisión y a una multa de 15.000 euros, aunque el fiscal había solicitado la absolución de la exministra. Finalmente se quedó en la acusación de haber actuado negligentemente. El abogado de la directora gerente ha afirmado que recurrirán la sentencia condenatoria.
Lagarde, nacida en París hace sesenta años, dio comienzo el pasado 5 de julio a su segundo mandato de cinco años como directora gerente del FMI, institución que lidera desde julio de 2011. Todo su primer mandato ha estado plagado de sospechas por el caso Tapie. El Comité Ejecutivo del FMI ha anunciado que se reunirá para valorar la sentencia.
La directora gerente del FMI se ha convertido en el primer representante de la institución en más de una década en renovar mandato, después de que sus más recientes antecesores en el cargo (Dominique Strauss-Kahn, Rodrigo Rato y Horst Köhler) renunciaran por diversos motivos antes de cumplir sus primeros cinco años al frente del FMI.
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