"Las proyecciones para la cosecha 2015/16 muestran un escenario de cambio, basado en la producción y las reservas mundiales (de azúcar) en baja. Esta perspectiva, combinada con la devaluación del real y los daños en la cosecha brasileña, de nuevo, hacia la producción de alcohol, favorecerá los precios internos del azúcar en 2016", informó el Centro de Estudios Avanzados de Economía Aplicada en un comunicado.
El aumento de los precios del azúcar en Brasil comenzó en el segundo semestre del 2015, según el texto.
En el sur del país, las fuertes lluvias -atribuidas al fenómeno de El Niño- retrasaron la cosecha actual, pero podrían beneficiar la temporada 2016/17. En el nordeste, sin embargo, se espera que la producción decaiga (hasta el 10% en las principales regiones azucareras), debido a una fuerte sequía.
El Cepea también espera un aumento en las exportaciones de azúcar de Brasil gracias a una previsión de déficit de esta materia prima a nivel mundial y por un tipo de cambio que provocó una reducción del precio de los productos brasileños expresados en dólares o euros.
En lo que se refiere al etanol, alcohol combustible abundante en los autos de Brasil, se espera que la demanda y los precios suban: la depreciación del real debería promover las exportaciones, mientras que un impuesto a la gasolina debería aumentar la competitividad del mercado de los biocombustibles en el mercado nacional.
"Esto puede representar el principio, incluso de forma gradual, de un retorno a la rentabilidad para el sector", dice el comunicado.
Brasil es el mayor productor y exportador de azúcar y el segundo productor de etanol después de Estados Unidos, que produce el combustible a partir del maíz.
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