De Guindos admite que España ha salido de la recesión pero no de la crisis

El ministro de Economía, Luis de Guindos, reconoce que España ha salido de la recesión, pero no así de la crisis. "Lo primero fue salir de la recesión, lo segundo tiene que ser salir de la crisis. Lo que quiero decir es que el ajuste bancario se ha producido, el ajuste presupuestario se ha producido, el ajuste inmobiliario se ha producido, incluso diría que el ajuste laboral ya se ha producido. La única cuestión ahora es mantener esas variables en unos parámetros de normalidad, evitando excesos, y continuar con reformas y ajustes", dice el ministro, en una entrevista en el diario El País.

De Guindos pronostica la creación de 600.000 puestos de trabajo para este año, una de las previsiones del Gobierno, y descarta que estas sean demasiado "optimistas". Además, pronostica crecimientos cercanos al 3% anual, hasta 2018, y la creación de 2'1 millones de empleos en los próximos cuatro años. "La proyección, del año 2016 al 2018, es que los salarios, la remuneración por empleado, crezcan cerca del 1,5% de media, por encima de la inflación", avanza De Guindos, que alerta también de que el principal riesgo es "deshacer las reformas". "Me dirá que es un mensaje electoral. Pero la reforma del sistema financiero, la del mercado laboral, la de unidad de mercado, la reforma energética..., yo creo que han funcionado", defiende.

De Guindos destaca también que "los ingresos tributarios están creciendo por encima de lo presupuestado". "Tenemos un ahorro en el pago de intereses de unos 1.500 millones, el pago en prestaciones por desempleo es menor de lo presupuestado, se recuperan los ingresos de la Seguridad Social… Yo diría que el objetivo es perfectamente factible", asegura en referencia al ajuste de déficit al 4'2% del PIB.

Preguntado por la amnistía fiscal, el ministro defiende que "ha habido en España antes y también en muchos países europeos". "Teníamos que buscar medidas", justifica, "y se ha aflorado un volumen de activos importantísimo". "Todos éramos conscientes en el Gobierno de que tenía efectos que no son los ideales, pero sus ventajas superaban los inconvenientes", afirma.

De Guindos elude pronunciarse sobre los antiguos cargos públicos del partido, como Rodrigo Rato, que han podido acogerse a esta amnistía. "Yo no sé quién se ha acogido a la regularización fiscal. Y no es mi obligación saberlo. Lo que valoró el Gobierno fue el contexto en el que nos encontrábamos, con una caída en picado de los ingresos y una situación límite de la economía española", dice.

Preguntado por la negativa del Gobierno a publicar la lista de 700 personas acogidas a la amnistía e investigadas por indicios de blanqueo, afirma que "cada uno es dueño de sus declaraciones". "Los casos de esas 700 personas se remiten, no porque haya indicios de blanqueo de capitales, sino porque son personas con exposición al sector público. Y el Sepblac lo que hace es ver si hay indicios, y devuelve entonces la lista a la Agencia Tributaria con la certificación de si ha habido, o no, movimientos sospechosos", explica De Guindos, que alude a razones de "estricta confidencialidad" para zanjar el asunto.

Sobre el estado de las negociaciones entre Grecia y el Eurogrupo, se muestra convencido de que "el objetivo es que Grecia vuelva a crecer". "Nadie quiere la salida de Grecia del euro, pero se deben cumplir las reglas. Eso implica una lista de reformas, que estamos dispuestos a analizar con flexibilidad", destaca. Según el ministro, la economía griega debe implementar reformas para incentivar su economía.