El álbum de verano de las islas de los famosos

  • Palma.- Ahora que agosto cierra sus maletas y septiembre acecha con sus rutinas, Baleares agota los pocos huecos que quedan en el álbum de fotos de su verano 2010, con la imagen central de Michelle y Sasha Obama acaparando todos los flashes, entre futbolistas, realeza y políticos a pie de playa.

El álbum de verano de las islas de los famosos
El álbum de verano de las islas de los famosos

Palma.- Ahora que agosto cierra sus maletas y septiembre acecha con sus rutinas, Baleares agota los pocos huecos que quedan en el álbum de fotos de su verano 2010, con la imagen central de Michelle y Sasha Obama acaparando todos los flashes, entre futbolistas, realeza y políticos a pie de playa.

El verano es una fiesta, ya lo decía Hemingway, y en Baleares más, como podrían corroborar desde Claudia Schiffer hasta la reina Noor de Jordania, la ministra Beatriz Corredor o el periodista Iñaki Gabilondo, que han pasado unos días en estas islas mediterráneas.

En ellas uno sabe que es verano no porque los termómetros se disparen o haya que reservar hueco en la playa, sino porque, de pronto, todo se llena de flashes.

Y en medio de los fogonazos de los paparazzi y las olas calientes del Mediterráneo asoman la melena ibicenca de Guti, la política a pie de playa menorquina de González Pons y las velas de los navegantes y famosos que pueblan la bahía de Palma en pos de la Copa del Rey.

No hay así agosto sin el posado de Ana Obregón, como tampoco lo habría sin las luces encendidas del Palacio de Marivent o sin el yate de los Alba surcando las aguas de Ibiza. También sería impensable un verano balear huérfano de visitas sorpresa.

La primera de este año fue tempranera y la protagonizó Alberto de Mónaco, quien escogió Cabrera para sumergirse en los fondos marinos y dejar que el mundo digiriera su anuncio de matrimonio con la ex nadadora sudafricana Charlene Wittstock.

Luego todas las atenciones se centraron en el mundial de fútbol y buena parte de los encargados de ponerle la estrella de campeones a España no dudaron en tomarse unos días de descanso en Mallorca, salir por Ibiza y disfrutar de la placidez de Formentera.

La lista de convocados es larga Xavi Hernández, Fernando Llorente, Xabi Alonso, Pepe Reina, Villa, Cesc Fábregas, "El niño" Torres y Pujol. Algunos hasta coincidieron en la isla blanca con la cantante Shakira, descansando de su "Waka-Waka". Solo faltó Casillas, su novia -la periodista Sara Carbonero- y el pulpo Paul.

Los que no fallaron a su cita con las islas han sido, un año más, Ana Obregón, la incombustible Masiel y su multitudinaria fiesta de cumpleaños, Lolita y Loles León, Dinio, Darek y una infinita lista de famosos televisivos, modelos y artistas que no se han querido perder ni uno solo de los saraos que se celebran en Ibiza.

Muchos de ellos han compartido pista de baile con nobleza y multimillonarios, pues en el verano balear uno se puede tropezar con la siempre mediática Paris Hilton, espiar a Jude Law y Siena Miller, saludar a la duquesa de Alba, otear en el horizonte el yate Giorgio Armani y disfrutar de la elegancia del mismísimo Valentino.

También se ha dejado fotografiar por Ibiza Liz Hurley, mientras su ex, el actor Hugh Grant, buscaba yate en el puerto de Andratx; a pocos kilómetros, en la escarpada sierra de la Tramuntana, Michael Douglas se tomaba unos días en familia, Robbie Williams paseaba su amor y Patricia Conde se iba de fiesta.

Numerosas figuras de la realeza, con reino y sin él, recalaron en Mallorca. La familia real ha marcado estilo y son muchos los que quieren emularles: en aguas mallorquinas suelen nadar desde Kyril de Bulgaria a María Gabriela de Saboya, Florentino o las hermanas Koplowitz.

Junto a ellos, y también con discreción absoluta a prueba de "paparazzi", han veraneado este año en Mallorca el presidente y el ministro de Exteriores alemanes; el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso; el ex ministro Ángel Acebes, el ex presidente José María Aznar -en visita relámpago- o Lilian Betancourt, dueña de L'Oreal, escándalo de la política francesa.

Pero si a este verano hubiera que ponerle un nombre, ese sería el de Michelle Obama. La visita de la primera dama estadounidense junto a su hija menor, Sasha, al palacio de Marivent fue la gran sorpresa.

Aunque la estancia duró apenas dos horas, el apellido Obama se suma al de sus antecesores, que no dudaron en elegir Baleares como destino: Kennedy, Nixon, Carter, Bush y Clinton.

Su imagen presidirá el álbum de este verano 2010, un estío con muchas caras, muchísimas fotos y un agosto, como siempre, demasiado corto.

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