El BCE ofrece un alivio a la primera emisión española de Tesoro de este mes

Madrid, 6 jun.- El Tesoro español indicó hoy que espera captar mañana un máximo de 2.000 millones de euros en distintas emisiones, una de ellas a diez años, en un marco de mayor optimismo por la promesa de liquidez ilimitada lanzada por el Banco Central Europeo y las mejores perspectivas de recapitalización de la banca.

El presidente del BCE, Mario Draghi, garantizó este miércoles que la entidad monetaria adjudicará liquidez ilimitada a un interés fijo hasta comienzos de 2013.

Asimismo, el órgano de Gobierno comunitario, la Comisión Europea, se mostró partidaria de estudiar "seriamente" la opción de usar el fondo comunitario de rescate para recapitalizar directamente a los bancos.

Además, el interés que España debe pagar a los inversores por la compra de su deuda soberana, lo que se conoce como prima de riesgo, se estrechó en las últimas horas hasta situarse en torno a los 500 puntos básicos.

En este ambiente y tras quince días sin enfrentarse al mercado, el Tesoro Público español ha optado para su emisión de mañana por un importe bajo, apenas 2.000 millones de euros, en un intento de demostrar que España se financia sin problemas, pues en lo que va de año ha emitido ya el 56,2 % de su objetivo para este año.

En concreto, emitirá bonos a tres años con cupón del 3,3 % y con vencimiento en octubre de 2014; bonos a cinco años con un cupón del 4,25 % y vencimiento en octubre de 2016, y obligaciones a diez años con cupón del 5,85 % y vencimiento en enero de 2022.

La anterior emisión de obligaciones a diez años se saldó con una rentabilidad del 5,78 %, aunque en el mercado secundario de deuda el bono de referencia con este plazo se cotiza por encima del 6 %.

Aunque los expertos consultados por Efe advierten de que un mínimo repunte de la rentabilidad de la deuda reabrirá las especulaciones sobre el rescate de la banca y la economía española, también consideran que el objetivo de la emisión es "muy manejable".

Además, recuerdan que, pese a que en las últimas subastas el interés que ha tenido que pagar España no ha dejado de subir, la reacción de los mercados ha sido excelente, con ratios de cobertura -proporción entre la demanda y el importe adjudicado- que ha superado en alguna ocasión las cuatro veces.