El beneficio de las grandes empresas españolas cayó un 37,4 por ciento hasta junio

  • Madrid.- El beneficio de las grandes empresas españolas -excluidas las financieras- cayó un 37,4% hasta junio, con lo que se aceleró la tendencia bajista iniciada a finales de 2008, mientras el número de trabajadores bajó el 2,5%, según se desprende de los datos de la Central de Balances del Banco de España.

El Banco de España pide moderar los sueldos públicos e influir así en los privados
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Madrid.- El beneficio de las grandes empresas españolas -excluidas las financieras- cayó un 37,4% hasta junio, con lo que se aceleró la tendencia bajista iniciada a finales de 2008, mientras el número de trabajadores bajó el 2,5%, según se desprende de los datos de la Central de Balances del Banco de España.

La reducción del beneficio, que contrasta con el incremento del 43,6% que registró en el mismo período de 2008, se debió sobre todo a la caída de los resultados extraordinarios (como, por ejemplo, venta de participaciones) y afectó especialmente a las empresas industriales, "directamente afectadas por el retroceso de la inversión en bienes de equipo".

El Banco de España, que recaba estos datos de una muestra de casi 9.000 empresas, destaca que los gastos de personal de las empresas no financieras se contrajeron un 0,7%, muy lejos del aumento del 4,6% que experimentaron en el primer semestre de 2008.

Esa reducción obedeció a la destrucción del 2,5% de los puestos de trabajo, especialmente los temporales, ya que el número de trabajadores interinos descendió el 17%, mientras que los fijos crecieron un 0,2%.

Según el organismo dirigido por Miguel Ángel Fernández Ordóñez, la destrucción de empleo se ha generalizado, ya que afectó al 61,7% de las empresas analizadas, casi 20 puntos más que un año antes.

La reducción del número de trabajadores afectó a todos los sectores, excepto a los de energía y agua, siendo las industrias y el comercio los que más destruyeron empleo, un 6,3% y un 4,4%, respectivamente.

En cambio, en el primer semestre de 2008, la industria había conseguido mantener casi invariable su número de trabajadores (bajó sólo un 0,4%), mientras que el comercio lo había elevado un 2,5%.

El ahorro generado por la destrucción de empleo se vio limitado por el aumento de las retribuciones de las plantillas, que fue del 1,8% entre enero y junio, la mitad en cualquier caso que en el mismo período de 2008.

El Banco de España destaca que las empresas con reducciones de empleo fueron aquellas en las que los salarios medios crecieron más intensamente (un 2,4%), mientras que en las que se mantuvo o aumentó el número de trabajadores o los costes salariales se mantuvieron.

Por sectores, el sector industrial fue el más afectado nuevamente, con un descenso del 1,3% de las remuneraciones, debido a las "drásticas reducciones sufridas por las retribuciones de carácter variable en las grandes empresas, que están ligadas a la evolución de la actividad y a los resultados empresariales".

El Banco de España también destaca la caída en los resultados extraordinarios obtenidos por las empresas no financieras, lo que también ha contribuido a mermar los beneficios.

La partida que más bajó, un 51%, fue la de resultados por enajenaciones y deterioro, ya que en 2008 se registraron "extraordinarias plusvalías como consecuencia de la venta de los negocios europeos de una gran empresa del sector eléctrico", en referencia a la venta de activos de Endesa a E.ON.

"En resumen, la contracción de la actividad productiva de las empresas no financieras en el primer semestre de 2009 se ha traducido en un importante deterioro de los excedentes y de sus datos de empleo, principalmente de carácter temporal. La moderación del crecimiento de los costes salariales y el notable descenso de los gastos financieros no han sido suficientes para evitar un descenso de los niveles de rentabilidad", señala el organismo.

El Banco de España destaca en cualquier caso que la actividad exterior mantuvo en el primer semestre una contribución positiva al producto, gracias al incremento de la demanda exterior neta (exportaciones menos importaciones) y que el endeudamiento empresarial aumentó ligeramente.

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