El Gobierno ha publicado hoy mismo en el BOE el Real Decreto que reforma el mercado laboral y que permite abaratar el despido y subvencionar a las empresas el pago de los finiquitos, lo que significa que a partir de mañana las empresas ya podrán acogerse al nuevo marco.
Esta celeridad contrasta con el consenso que, en teoría, quiere conseguir el Ejecutivo desarrollando la reforma como proyecto de ley en el Hemiciclo. Un proceso que permitirá introducir modificaciones, pero que también alargará hasta octubre o noviembre el desenlace final, encenciendo así todavía más el fuego de la desconfianza que está quemando a la economía española.
Para conseguir esta acelerada entrada en vigor, el Ejecutivo ha bautizado la reforma del mercado laboral con el carácter de "reformas urgentes". Unos cambios que conllevarán rebajar de 45 días a 33 días la indemnización por despido de los contratos fijos.
Además, el Ejecutivo subvencionará a las empresas el pago de los finiquitos, ya que sufragará 8 días por año trabajado, y deja abierta la puerta a que cualquier empresa en pérdidas, sin importar cuánto tiempo lleve en número rojos, pueda realizar despidos colectivos con apenas 20 días de indemnización.
El hecho de que haya sido en miércoles el Consejo de Ministros en el que se ha aprobado el decreto, frente a la tradicional cita de los viernes, ha facilitado que éste haya entrado en vigor al día siguiente, cuando los habitual es que la publicación de los acuerdos en el BOE se realice los lunes.
Los sindicatos han criticado con dureza el Real Decreto, cuya redacción definitiva es todavía peor, según los representantes de los trabajadores, que la presentada durante las negociaciones, y por eso, han pedido al Congreso que rechace el documento el próximo martes.
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