El déficit público de Portugal acaba el tercer trimestre en el 4,9 % del PIB

  • El déficit público de Portugal se situó en el tercer trimestre del año en el 4,9 % del PIB, lo que supone una mejora de ocho décimas respecto al dato de septiembre de 2013, aunque sigue por encima de sus previsiones iniciales.

Lisboa, 23 dic.- El déficit público de Portugal se situó en el tercer trimestre del año en el 4,9 % del PIB, lo que supone una mejora de ocho décimas respecto al dato de septiembre de 2013, aunque sigue por encima de sus previsiones iniciales.

Así se desprende de las cifras facilitadas hoy por el Instituto Nacional de Estadística luso (INE), cuyos técnicos atribuyeron esta reducción del déficit a un aumento de los ingresos totales del Estado más expresivo que el incremento registrado del gasto público.

Las arcas estatales recibieron más gracias sobre todo a la subida de la recaudación por los impuestos sobre el rendimiento y el patrimonio y por las tasas sobre la producción e importación, de acuerdo con sus cálculos.

La diferencia entre ingresos y gastos arrojó un saldo negativo de 6.344 millones de euros, equivalente al 4,9 % del PIB luso, lejos del 6,5 % en el que se situó en el primer semestre de 2014.

Estos números no incluyen todavía "ningún impacto" por la decisión de crear una nueva entidad financiera para agrupar los activos saludables del Banco Espírito Santo (BES), intervenido por el Banco de Portugal en agosto de 2014.

El Estado luso concedió un préstamo a las entidades financieras lusas reunidas en el llamado "Fondo de Resolución" de 3.900 millones de euros, crédito que deberá recuperar de forma íntegra antes de agosto de 2016 pase lo que pase con la venta de esta nueva entidad, llamada comercialmente Novo Banco.

El impacto en las cuentas de esta operación sólo será analizado a partir del próximo marzo, cuando se procederá a revisar el déficit, según estas mismas fuentes.

El Gobierno portugués prevé cerrar 2014 con el déficit en torno al 4,9 % del PIB, nueve décimas por encima del objetivo acordado con los organismos internacionales y exactamente en los mismos niveles que el dato registrado en 2013.

No obstante, el Ejecutivo luso subraya que este incumplimiento se debe únicamente a "un conjunto significativo de alteraciones metodológicas", ordenado por Europa y que obligó a incluir créditos a empresas públicas.

El objetivo acordado con la UE y el Fondo Monetario Internacional para 2015 pasa por reducir el déficit hasta el 2,7 % del PIB.

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