El Gobierno italiano negocia con los agentes sociales sus nuevas reformas

  • El Ejecutivo italiano vuelve a reunirse hoy con los agentes sociales para abordar las nuevas reformas económicas y la aceleración de algunas de las que contiene su último plan de austeridad que se comprometió a acometer el primer ministro, Silvio Berlusconi, el pasado viernes.

Roma, 10 ago.- El Ejecutivo italiano vuelve a reunirse hoy con los agentes sociales para abordar las nuevas reformas económicas y la aceleración de algunas de las que contiene su último plan de austeridad que se comprometió a acometer el primer ministro, Silvio Berlusconi, el pasado viernes.

Está previsto que el encuentro comience a las 17.00 hora local (15.00 GMT) en la sede de la Presidencia del Gobierno en Roma, Palacio Chigi, aunque aún no se sabe con seguridad si el jefe del Ejecutivo, quien ha pasado los últimos días en su residencia de la isla de Cerdeña, estará presente.

Esa nueva reunión entre patronal, sindicatos y Gobierno, que se produce en un día en el que el Tesoro italiano intenta colocar 6.500 millones de euros en bonos a un año, sucede a la ya celebrada el pasado jueves, en la que el tan prometido pacto social por la estabilidad y el crecimiento económico quedó emplazado a septiembre.

Ahora, la presión de los mercados sobre la deuda italiana y las condiciones impuestas por el Banco Central Europeo (BCE) para comprar bonos de Italia hacen todavía más urgente la necesidad de diálogo con patronal y sindicatos, quienes, como el pasado jueves, mantendrán una reunión a parte antes de ir a Palacio Chigi.

La intención, según informan los medios italianos, es encontrar un acuerdo sobre la mayor parte de los puntos para que el Ejecutivo pueda aprobar las reformas necesarias en forma de decreto ley ya la semana que viene en un posible Consejo de Ministros extraordinario que dé paso lo antes posible a la tramitación parlamentaria.

La prensa del país recoge hoy las que parecen ser las nuevas medidas que ha preparado el ministro de Economía, Giulio Tremonti, para conseguir ese adelanto a 2013 del equilibrio presupuestario, frente a la fecha de 2014 que recogía el plan de austeridad de 79.000 millones de euros aprobado a mediados de julio.

Según las filtraciones de ese plan, el Gobierno se plantea la imposición de un gravamen adicional sobre la segunda vivienda de los ciudadanos del país, así como un aumento de los impuestos sobre los rendimientos financieros y sobre el patrimonio del contribuyente, punto este último que parece no gustar mucho a Berlusconi.

El Ejecutivo se plantea también adelantar el proceso que retrasará la edad de jubilación vinculándola a la esperanza de vida, así como la privatización de empresas municipales y la venta de parte de las participaciones del Estado en algunas empresas que ya cuentan con capital privado.

La prensa asegura hoy que los cambios en el sistema de asistencia y de pensiones, incluidas también las de invalidez, no cuentan con la aprobación, ni de los sindicatos, ni del principal socio de Gobierno de Berlusconi, la federalista Liga Norte (LN) de Umberto Bossi.

Los sindicatos, la patronal y también la banca exigen al Gobierno que acometa primero recortes sobre el gasto de la clase política antes de exigir nuevos esfuerzos económicos a las familias, sobre las que ya recae el mayor peso recaudatorio del plan de ajuste.

Tras los contactos con los líderes europeos, Berlusconi anunció el pasado viernes su intención de introducir la exigencia del equilibrio en las cuentas públicas en la Constitución, así como una liberalización del sector empresarial, una reforma laboral y la aceleración de la reforma fiscal que debe desarrollar el Parlamento, tras su aprobación en Consejo de Ministros el pasado 30 de junio.

El pasado 22 de julio el Ejecutivo aprobó además un proyecto de ley para reducir considerablemente el número de parlamentarios.

Mostrar comentarios