El gobierno subraya que el 62% del recorte del déficit ha sido en gastos y sólo el 38% en ingresos

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, replicó hoy a las críticas de que el recorte del déficit público está realizándose más a través de la subida de impuestos que de la reducción del gasto poniendo en valor que sólo el 38% de ese recorte se ha hecho por aumento de los ingresos, frente al 62% que se ha ejecutado por austeridad en los desembolsos.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la vicepresidenta llamó a “ceñirse a los datos”, volvió a justificar el déficit anual de 2012 apelando al desfase del de 2011 y defendió que las medidas recaudatorias del Gobierno se han llevado a cabo de manera “equilibrada” pese al problema de la caída de los ingresos.
No obstante, reiteró que “en cuanto las previsiones económicas lo permitan”, el Ejecutivo eliminará algunos de los impuestos que se han subido en lo que llevamos de legislatura. No entró a comentar la recomendación en este sentido que trasladó al Gobierno la expresidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, sobre la que se limitó a dar la bienvenida a los dirigentes autonómicos que reconocen que “tenemos que cambiar y mucho”.
Como ejemplo del esfuerzo del Gobierno en la reducción del gasto público, citó la de altos cargos y empleos públicos, de los que se han reducido 300.000, justo los que aumentaron entre 2008 y 2011 en plena crisis económica y despidos en el sector privado. También recordó la limitación a las remuneraciones e indemnizaciones de los directivos de empresas públicas y la fusión de muchas de éstas.
Para los próximos meses, destacó la importancia de la reforma de la Administración Local, que mencionó en varias de las preguntas sobre diversas materias que le formularon los periodistas, y para la que cuantificó un ahorro de 8.000 millones en los primeros dos años, reconociendo que la estructura administrativa se puede adelgazar aunque no se haya hecho en 35 años.
Finalmente, aseguró que hasta el recorte del gasto público se ha hecho de manera equilibrada, como pondría de manifiesto el que el 70% de los pensionistas van a ver incrementada su percepción en un 2%, por encima del IPC previsto.