La bolsa ha terminado la sesión con muy mal sabor de boca. Arrastradas por Wall Street, que ha acumulado en las dos primeras horas de contratación una caída del 1%, las acciones españolas se han venido abajo con toda claridad.
Telecinco, Iberdrola y la banca se han llevado la peor parte con caídas entre el 3,5% y el 4,5% que ha tenido de rojo el selectivo y el mercado continuo. De hecho, apenas Grifols escapa de la corriente bajista.
Se trata de la tercera sesión consecutiva de descensos para el Ibex, al que hoy han seguido en su cuesta abajo todas las bolsas europeas. No obstante, las del índice español han sido las más importante en el Viejo Continente y han devuelto al Ibex por debajo de los 9.600 puntos, un nivel que ha sin éxito ha intentado defender contra viento y marea en los últimos minutos de la sesión. .
En este proceso, Wall Street está siendo definitivo. Los inversores continúan deshaciendo posiciones tras el impacto negativo que ayer provocó conocer que la Reserva Federal mantendrá los tipos en mínimos porque considera que la recuperación económica va peor de lo esperado.
De vuelta al mercado español, otro protagonista es Telefónica, que ayer reconoció la venta de un 8% de Portugal Telecom a UBS y TPG, una venta dirigida a rodearse de caballero blancos ante la próxima junta de la operadora lusa, con el objetivo de sacar adelante la oferta por Vivo.
La sesión también ha estado marcada por la fortaleza del euro frente al dólar. La divisa europea se ha revalorizado medio punto porcentual hasta el 1,2323 frente al billete verde.
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