El organismo regulador francés prorroga la prohibición de las ventas en corto

París.- La Autoridad francesa de los Mercados Financieros (AMF), supervisora de la Bolsa de París, anunció hoy que ha decidido prorrogar "hasta nueva orden y por una duración que no pueda exceder el 11 de noviembre" la suspensión de las ventas en corto al descubierto en diez valores bursátiles.

Esa medida, que había entrado en vigor el pasado 12 de agosto durante un plazo inicial de 15 días, se toma, según un comunicado, en estrecha colaboración con los organismos reguladores de Bélgica, España, Italia y Grecia y en coordinación con la Autoridad Europea de Valores Financieros (ESMA).

La medida afecta a los bancos BNP Paribas, Société Génerale, Crédit Agricole y Natixis, y a las aseguradoras Axa, CNP Assurances, Scor, April Group, Euler Hermès y CIC, y a diferencia de mediados de mes, no incluye a la aseguradora Paris Ré.

La AMF precisó que hasta esa fecha continuará vigilando "de cerca" los mercados y sus evoluciones y antes de finales de septiembre evaluará esta medida, que se levantará no solo "cuando las condiciones del mercado lo permitan", sino también, "en la medida de lo posible, de manera coordinada".

Las posiciones cortas o apuestas a la baja consisten en tomar prestadas acciones para venderlas en el mercado con la perspectiva de que su precio caerá.

Es en ese momento cuando el fondo especulador procede a recomprar los títulos de forma más barata y los devuelve a su propietario, obteniendo como ganancia la diferencia entre el precio de venta y el de compra posterior.

Cuando se anunció la prohibición la ESMA consideró que, pese a ser un instrumento financiero válido en algunas ocasiones, ese tipo de operaciones pueden usarse de forma abusiva "en combinación con la difusión de falsos rumores", lo que debe ser regulado y sancionado.

Con esa medida se buscaba frenar esos rumores que desestabilizan los mercados y que el pasado 10 de agosto hicieron que el parqué parisino se hundiera un 5,45 % arrastrado por las pérdidas de los valores financieros a causa de los comentarios sobre una posible degradación de la nota de la deuda gala y la solvencia de algunos bancos franceses.