El pp acusa al psoe de no creer en las administraciones locales

La vicesecretaria de Organización y Electoral del PP, Ana Mato, criticó hoy que, pese a su importancia, los ayuntamientos sean “algo lejano” para el Partido Socialista, que, a su juicio, “no cree en las administraciones locales, no ha hecho nada por ellas en los siete años de Gobierno y en esta época de crisis las ha olvidado a su suerte”.
Mato, que presidió una mesa dedicada a esta materia en la XVII Intermunicipal del PP, que se está celebrando en Zaragoza, remarcó que los alcaldes y concejales son quienes están más cerca de los problemas sociales producidos por la crisis y “a quienes cada día se acercan aquellas personas que han perdido su empleo, que tienen a todos sus familiares en paro, que tienen dificultades para llegar a fin de mes; en suma, las víctimas de la política irresponsable de Zapatero”.
Según la dirigente popular, su partido es imprescindible para renovar la vida municipal y “los ciudadanos lo saben y lo van a demostrar en las próximas elecciones”. Prometió que “el PP mantendrá un compromiso basado en la transparencia, en las conductas éticas, en la cercanía a los ciudadanos y en una gestión de calidad de los servicios”, y fijó como "prioridad básica" una política social "que haga posible el empleo y el bienestar de los españoles, para que la recuperación de nuestra economía no sea un mero voluntarismo".
La dirigente popular propugnó una vertebración de España en torno a tres administraciones que presten servicios de manera coordinada, sin duplicidades y con marcos jurídicos y financieros que garanticen que pueden cumplir con sus funciones y con las demandas de los ciudadanos. Por eso, abogó por una gran reforma institucional que vaya a encaminada a corregir las disfuncionalidades actuales: competencias repetidas, servicios ineficientes y derroche del gasto público.
Mato anunció que su partido quiere avanzar en la segunda descentralización, fijando marcos competenciales adecuados a los ayuntamientos, regulando las competencias impropias y dotándoles de marcos financieros que garanticen autonomía y suficiencia. Según denunció, la financiación es, precisamente, el gran problema de los ayuntamientos, y habría comenzado cuando el Gobierno ignoró la crisis y calculó ingresos de acuerdo con previsiones ficticias.
“Ahora pide que su equivocación la paguen estas administraciones", continuó. "Les exige que devuelvan dinero que ya se han gastado y quiere impedir que muchos ayuntamientos puedan recurrir al endeudamiento, cuando el Gobierno socialista ha aumentado la deuda en 20 puntos del PIB”.
“Por eso pedimos, junto a la reforma estructural de los municipios, un plan coyuntural que les permita acceder a financiación para pagar las deudas a proveedores; mayor flexibilidad para endeudarse, incluso con garantía del Estado para que resulte más asequible; garantía de ingresos mínimos para poder cumplir con sus funciones y prestar los servicios encomendados y empezar a trabajar ya en un modelo de financiación definitivo para los Ayuntamientos”, finalizó.