El presidente del comité de Campofrío pide una ayuda similar para empresas

  • El presidente del comité de empresa de la planta de Campofrío incendiada en Burgos, Hilario Sancho, defiende la concesión del mismo tipo de ayudas para todas las empresas que, por causas de fuerza mayor, puedan desaparecer y destruir puestos de trabajo como ha ocurrido en la que trabajaba.

Burgos, 4 ene.- El presidente del comité de empresa de la planta de Campofrío incendiada en Burgos, Hilario Sancho, defiende la concesión del mismo tipo de ayudas para todas las empresas que, por causas de fuerza mayor, puedan desaparecer y destruir puestos de trabajo como ha ocurrido en la que trabajaba.

Sancho, en declaraciones a Efe, considera "ejemplar" el proceso seguido para su reconstrucción con la primera firma cárnica española tras el incendio, así como el respaldo a la plantilla, lo que a su juicio debe ser "el guión a seguir siempre en casos similares".

Hilario Sancho espera que todas las instituciones cumplan sus compromisos con Campofrío, como ha hecho la Junta de Castilla y León, a la que pide el mismo trato para cualquier planta que sufra una desgracia en el futuro.

Para el presidente de la representación de los trabajadores de Campofrío, el compromiso del presidente del Grupo, Pedro Ballvé, ha sido clave para que la firma vuelva a tener en un futuro próximo la presencia que tenía en Burgos.

Considera que sin la intervención del presidente de Campofrío, seguramente la empresa se habría ido de Burgos, porque las multinacionales van donde es más barato.

Sin embargo, Ballvé dijo a las autoridades y a los representantes de los trabajadores desde el primer momento, que tiene mucho cariño a Burgos y que no quiere fallar a la ciudad donde nació el grupo cárnico.

Tras el acuerdo entre empresa y trabajadores que garantiza la reincorporación y los complementos salariales mientras dure la suspensión temporal de empleo, una comisión de trabajo seguirá gestionando los casos puntuales de prejubilaciones, recolocaciones, traslados y contingencias que se puedan producir en este periodo de unos dos años hasta que la futura Campofrío en Burgos esté en pie.

En su opinión, no tiene demasiada importancia que la nueva Campofrío se estructure en Burgos en una o dos plantas o que se mantenga en una u otra ubicación dentro de la ciudad, que son aspectos aún no definidos en el proyecto que está ya en redacción.

El presidente del comité confía en que habrá más recolocaciones, para las que se ha primado hasta ahora a los 174 empleados con menos tiempo de paro y no llegaban a los dos años que se estima que podría tardar en construirse la nueva planta de Campofrío.

El 9 de enero, la plantilla de Campofrío volverá a reunirse a las puertas de la factoría incendiada, donde continúan las labores de desescombro, para felicitarse el nuevo año y decidir futuras acciones.

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