El pulpo gallego, pese a la veda, menos tentacular en las rías y los platos

  • El pulpo gallego, uno de los símbolos de la gastronomía gallega, acosado por la sobreexplotación pese a los periodos de veda anuales, extiende cada vez menos sus tentáculos en las rías y en los platos, donde ha sido suplantado por el procedente de las costas africanas.

Lorena R. de la Torre

Ourense, 13 ago.- El pulpo gallego, uno de los símbolos de la gastronomía gallega, acosado por la sobreexplotación pese a los periodos de veda anuales, extiende cada vez menos sus tentáculos en las rías y en los platos, donde ha sido suplantado por el procedente de las costas africanas.

El BNG anunció hoy la presentación ante el Parlamento de Galicia de una iniciativa destinada a reclamar "medidas para hacer frente a la práctica desaparición del pulpo" en el litoral gallego.

La citada formación política, que pide datos de las iniciativas adoptadas en los últimos años en favor del pulpo de las rías gallegas, observa la escasez de capturas de las embarcaciones este año y concluye que "la pesca del cefalópodo resulta económicamente inviable" para el sector.

La Xunta lleva a cabo desde 2006 vedas y restricciones a la captura de pulpo para fomentar la recuperación de la especie en las rías gallegas, que sufrió particularmente la marea negra generada tras el hundimiento del petrolero "Prestige", en noviembre de 2002.

En los cinco primeros meses de este año, antes del inicio de la veda, las lonjas gallegas vendieron más de 1.891 toneladas de pulpo, casi 223 más que el mismo período del año pasado, por un valor de 9,8 millones de euros, un 3,4% más que en el mismo periodo del año anterior, lo que supone un aumento de 13% de capturas y de 53% en rentabilidad, según datos divulgados recientemente por la Xunta.

Algunos sectores cuestionan la efectividad de esas medidas atendiendo a la proliferación de pescadores furtivos que operan en diversos puntos del litoral.

En octubre del año pasado, agentes del Servicio de Guardacostas se incautaron de cerca de una tonelada de pulpo en varios controles en la zona coruñesa de Corcubión.

El pulpo constituye uno de los platos favoritos de los turistas que visitan Galicia, pero también uno de los manjares más apreciados por la población con una larga tradición de festividades en honor a esa especie marina.

La anual fiesta del pulpo en la localidad orensana de O Carballiño celebra mañana su 49 edición y espera acoger a unas 70.000 personas y ofrecerles de 13 a 14 toneladas de pulpo, carne "ó caldeiro" y empanada.

Aunque O Carballiño está en el interior de Galicia, el Ayuntamiento indica que hay documentación del varios siglos atrás indicando que una comunidad de frailes cistercienses comerciaba con pulpo procedente del puerto de Marín a cambio de otros productos alimenticios, lo que ha dado lugar a una larga tradición culinaria.

Uno de los principales "pulpeiros" o cocineros de ese cefalópodo en O Carballiño, César Álvarez, indicó a Efe que "hay un descenso de la producción de pulpo en las rías gallegas" y, en contrapartida, "un aumento del que se importa, principalmente de Marruecos y Mauritania".

Según cálculos de Álvarez, actualmente más de la mitad del pulpo en Galicia es de importación, lo que ha repercutido en un aumento del precio, que ha pasado "de cinco euros a carca de once euros el kilo".

Subrayó que en O Carballiño hay "unas noventa familias que viven del negocio del pulpo", pero advirtió que el incremento de los precios debido a la importación, añadido a la crisis económica, está afectando a las ventas.

El alcalde de O Carballiño, Argimiro Marnotes, reconoció que puede haber menos pulpo en la rías gallegas, pero subrayó a Efe que el principal problema es el aumento de las exportaciones de pulpo gallego como ingrediente para ensaladas en Japón.

El líder del PP, Mariano Rajoy, diversos conselleiros de la Xunta y varios representantes de zonas de producción de pepino del sur de España podrán degustar el pulpo aderezado con pimentón y aceite, conforme a la tradición gallega.

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