Lisboa, 16 oct.- Centenas de empresarios de la restauración protestaron hoy junto al Parlamento portugués con una llamativa "cacerolada" para pedir que el IVA en el sector baje del actual 23 por ciento hasta el 6 %.
El Movimiento Nacional de Empresarios de la Restauración de Portugal, impulsor de la protesta, congregó a varias centenas de representantes del sector, que utilizaron el incómodo ruido emitido por la fricción de las cacerolas para expresar su oposición a las medidas fiscales del Gobierno conservador.
La organización alertó de que, en caso de que se mantenga el 23 % de IVA, 100.000 personas podrán acabar en el paro y 40.000 empresas declararán quiebra.
El Ejecutivo luso aumentó este año del 13 al 23 % la carga impositiva de IVA para mejorar su recaudación estatal con la meta de cumplir los objetivos a los que se comprometió en el rescate financiero de 78.000 millones de euros solicitado a la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Sin embargo, Pereira aclaró que lo que demanda el sector es una reducción hasta el 6 %, la misma carga que se aplica a los hoteles, recordó.
"Es un sector vital para la economía del país, para el turismo: una de las tres principales razones por las que los turistas visitan el país es la gastronomía, que es muy rica", aseveró.
"La cacerolada" se suma a las recientes protestas ciudadanas por la presentación gubernamental de los Presupuestos estatales para el 2013, los más duros de la historia reciente de Portugal donde se incluye un aumento inédito de impuestos.
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