El sector manufacturero de EEUU crece a su mayor nivel desde abril de 2011

Nueva York, 1 nov.- El sector manufacturero de Estados Unidos alcanzó en octubre el mayor nivel de producción desde abril de 2011, confirmando así una tendencia al alza observada desde junio, anunció hoy el Instituto de Gestión de Suministros (ISM, por su sigla en inglés).

El índice que elabora el ISM para medir la actividad de ese sector se situó el mes pasado en 56,4 puntos, comparado con 56,2 de septiembre, y por encima de 55 puntos que habían previsto los expertos.

Se consolida de esta manera la tendencia a la expansión de la producción manufacturera, ya que si ese índice se sitúa por encima de los 50 puntos refleja un crecimiento generalizado del sector, mientras que si queda por debajo de esa cota significa que hay una situación de contracción.

"Tanto el índice de producción como el de nuevos pedidos han quedado por encima de los 60 puntos durante los últimos tres meses", dijo hoy Bradley Holcomb, el presidente del comité del ISM encargado de elaborar este índice a través de un sondeo entre empresas del sector.

Así, el subíndice que mide la evolución de los nuevos pedidos subió ligeramente en octubre 0,1 puntos para colocarse en 60,6 unidades, al tiempo que el relativo a la producción perdió 1,8 para terminar en 60,8 puntos.

"Los sondeos muestran comentarios por lo general positivos sobre el actual clima empresarial, aunque las respuestas son mixtas en lo que refiere a si el cierre parcial del Gobierno y el temor a una suspensión de pagos tuvieron algún efecto sobre los resultados de octubre", añadió Holcomb.

Durante los primeros 16 días del mes, la administración estadounidense cerró parcialmente a causa de la falta de acuerdo en el Congreso entre demócratas y republicanos para prolongar los presupuestos, una crisis que adquirió aún mayor severidad a medida que la fecha límite para aumentar el techo de endeudamiento de EE.UU. se acercaba y las posiciones seguían igual de enrocadas.

Finalmente, el 16 de octubre los líderes de ambos partidos en el Senado alcanzaron un acuerdo que permitió reabrir la administración y elevó como medida de urgencia el techo de endeudamiento, además de fijar que el debate se postergase hasta el próximo 7 de febrero.