Embajador alemán en España prevé brotes verdes dentro de entre 18 y 24 meses

Murcia, 18 jun.- El embajador alemán en España, Reinhard Silberberg, prevé que la economía nacional dé sus primeros brotes verdes dentro de entre 18 y 24 meses, una vez que comiencen a notarse los efectos de las políticas de austeridad y las reformas estructurales emprendidas por el Gobierno de Mariano Rajoy.

En la conferencia inaugural del foro privado Nueva Murcia, impulsado por empresarios de esta comunidad para proyectarla hacia el exterior, Silberberg ha comparado el proceso español de reformas y de medidas de ahorro en la administración central con el que Alemania emprendió entre 2001 y 2002.

Un país que entonces tenía "un sistema de pensiones insostenible, una sanidad pública deficitaria, un derecho laboral muy rígido, un déficit casi fuera de control por la fuerte inversión realizada en la antigua RDA tras la reunificación, administraciones públicas con duplicidades y una economía que había perdido competitividad", pero que tras las reformas realizadas volvió a crecer, según Silberberg.

"Los recortes y reformas estructurales son muy dolorosos, pero no hay alternativa. Nunca hay soluciones simples, y el camino iniciado por el Gobierno español es el correcto al luchar contra la deuda pública para recuperar la confianza de los mercados", ha dicho.

En su opinión, España es "un país fuerte, tiene un gran potencial, grandes empresas y empresarios muy creativos, por lo que no hay razón para el pesimismo; antes al contrario, debemos ser optimistas, porque, a medio plazo, los resultados de la audaz reforma laboral, la sanitaria que está en camino, la administrativa y financiera que están en la agenda de Rajoy y el saneamiento del sector financiero, sumados a la disciplina presupuestaria y a la fundamental recuperación de la competitividad, serán positivos".

Silberberg ha calificado de "insolente" decir que Alemania es insolidaria, cuando con 211.000 millones de euros es el país que más contribuye al Fondo Europeo de Estabilidad Financiera y al Mecanismo Europeo de Estabilidad.

Alemania "no es menos europeísta que antes ni menos solidaria con sus socios de la UE", pero su oposición a los eurobonos, a que el BCE compre deuda soberana en el mercado primario o a que los préstamos de los instrumentos de rescate se hagan directamente a los bancos y no a los Gobiernos solo responde a que los tratados con los que los organismos europeos se gobiernan "lo prohíben", ha afirmado.

En cuanto a la ayuda de hasta 100.000 euros que recibirá España para sanear su sistema bancario, el embajador ha dicho que es "la mayor urgencia" del país, porque este "necesita liquidez para que fluya el crédito a las empresas", y ha recordado que también Alemania tuvo que utilizar "miles de millones de euros" para ayudar a entidades financieras con problemas.

Respecto a la política fiscal, ha defendido que "todo sistema tributario tiene que ser justo, y los más fuertes tienen que soportar mayor presión fiscal. En Grecia, los más ricos no pagan impuestos, y eso no es justo".

"Los jefes", ha dicho en referencia a la próxima cumbre de presidentes de Gobierno europeos, "siempre están buscando la mejor solución de consenso, y creo que la van a obtener, pero no vale la pena forzar que uno de los países miembros tome decisiones contrarias a sus posiciones", ha señalado al hilo de las presiones que sufre Alemania desde otros países para que dé su brazo a torcer en su exigencia de disciplina presupuestaria a sus socios.

A su juicio, una vez despejada la incógnita griega sobre su posible abandono del euro, el pacto fiscal que se decida en la reunión "clave" del 28 y 29 de junio fortalecerá la coordinación económico-financiera del Eurogrupo, al tiempo que perfeccionará el mercado interior y eliminará obstáculos al comercio.

Por último, preguntado por la senda alcista de la prima de riesgo española, ha señalado que "los mercados están supernerviosos, no son los más racionales, tienen elementos irracionales y espontáneos", por lo que todos debemos saber "qué dimensión tiene el agujero negro" del sistema bancario español.