La exclusión de la UEFA priva a Osasuna de 'saborear' un caramelo de 12 millones

El CA Osasuna deja atrás una temporada de sobresaliente a nivel deportivo, donde rozó la hazaña tras caer derrotado ante el Real Madrid en la final de la Copa del Rey y alcanzó un séptimo puesto, premiado con un boleto europeo para disputar la Conference League. Sin embargo, la UEFA ha truncado el regreso de los 'rojillos' al fútbol europeo 16 años después de su última aventura por el Viejo Continente.

El Comité de Apelación de la UEFA ha comunicado la exclusión del club navarro tras reafirmar el dictamen inicial del Comité de Control, Ética y Disciplina de la UEFA, donde se recomendó no admitir a Osasuna en la próxima edición de la Conference por el caso de corrupción que salpicó a la directiva que dirigía el club pamplonica hace nueve años. La reacción de Osasuna a la decisión ha sido inmediata. El club considera "un grave atropello a sus derechos" que recurrirá ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS).

Más allá del impacto deportivo

A nivel deportivo, el 'bandazo' de la UEFA priva a la entidad navarrense de disputar una competición continental, a la que había accedido por sus propios méritos en el terreno de juego, y pone coto a la ilusión que había generado entre la afición 'rojilla' esta temporada con el 'extra' europeo. Pero a nivel económico, ¿cuál es el impacto que tiene para Osasuna no disputar la Conference?

De seguir adelante con su participación, Osasuna tendría que superar una ronda eliminatoria previa, que ostenta un premio de 550.000 euros, a los que se añaden 2,94 millones por clasificarse a la fase de grupos. A partir, de ahí el saco de premios se va inflando a medida que el club avance en la competición hasta optar a un premio final, en conceptos fijos de 12,39 millones de euros.

A esta cantidad habría que sumarle las variables que la UEFA rige para esta competición. La institución reparte 500.000 euros por victoria y 166.000 euros por empate. Por otro lado, UEFA reparte desde 44.500 euros hasta 1,42 millones por coeficiente -el ranking que utiliza para clasificar a los equipos según su desempeño histórico en las competiciones europeas- y destina a cada país una cantidad de dinero, que se reparte entre los equipos participantes en función de su valor como mercado televisivo, a través de un sistema que se conoce como 'market pool'.