Fabricante chino Dongfeng invertirá en PSA Peugeot si ve "beneficios mutuos"

  • El fabricante automovilístico estatal chino Dongfeng Motor, que está en conversaciones para comprar el 30 por ciento de la francesa PSA Peugeot-Citroën, también su socia en el país oriental, seguirá avanzando en sus negociaciones siempre que vea posible alcanzar "beneficios mutuos" con ese paso.

Shangai (China), 26 oct.- El fabricante automovilístico estatal chino Dongfeng Motor, que está en conversaciones para comprar el 30 por ciento de la francesa PSA Peugeot-Citroën, también su socia en el país oriental, seguirá avanzando en sus negociaciones siempre que vea posible alcanzar "beneficios mutuos" con ese paso.

Así lo aseguró hoy el director general de Dongfeng, Zhu Fushou, durante un foro de negocios sobre el futuro del sector celebrado en la Escuela Internacional de Negocios China-Europa de Shanghái (CEIBS).

Zhu evitó confirmar los rumores de que una delegación de PSA se desplazará próximamente a la sede de Dongfeng en Wuhan para avanzar en las conversaciones sobre la posible inversión, que de llevarse a cabo convertiría a la firma china en la mayor accionista del segundo mayor fabricante de coches europeo.

"En mi opinión, dentro de una cooperación de negocios, cooperar para una reestructuración corporativa es bastante normal, está dentro de lo habitual", minimizó el asunto, y añadió: "Si podemos buscar beneficios mutuos, de una manera complementaria, entonces por supuesto que vamos a seguir adelante con nuestra cooperación".

"Por ejemplo nuestra relación con Volvo (firma que compró en 2010 la fabricante privada china Geely, con cuya filial de camiones Dongfeng tiene también una empresa mixta en China) es el resultado de varios años de preparaciones y conversaciones, y pensamos que esa cooperación es de mutuo beneficio para Volvo y para Dongfeng", dijo.

"Sobre la cooperación con PSA", añadió, "como socios que somos (de Peugeot en China) por supuesto estamos siguiendo con mucho interés su rendimiento, ya que ha sufrido más de 5.000 millones de euros de pérdidas, pero estamos avanzando muy rápido" en las conversaciones, comentó.

Además, el directivo de la segunda mayor fabricante del país destacó que con su empresa mixta en China, Dongfeng Peugeot-Citroën Auto (DPCA), van a asistir a un "crecimiento neto de más de un 30 por ciento (de los beneficios), y de otro 40 por ciento en las ventas netas".

"En cualquier caso", dijo para evitar adelantar más detalles, "deberíamos hacer cada cosa en su momento oportuno", por lo que más adelante, llegado ese momento: "Enviaremos el mensaje apropiado por los canales adecuados, ya que somos una empresa pública", se excusó.

El grupo PSA se encuentra en proceso de reestructuración por sus apuros económicos, fruto de la caída del consumo por la crisis, y a pesar de recibir en 2012 ayudas del Estado francés prepara numerosos despidos y el cierre de una fábrica.

En el tercer trimestre del año sus ventas bajaron un 3,7 por ciento interanual, hasta los 12.100 millones de euros (16.700 millones de dólares).

PSA atraviesa una situación difícil, con un retroceso de sus ventas mundiales de un 5,2 por ciento el año pasado, tras caer otro 17,5 por ciento entre 2010 y 2012, y con problemas de liquidez al acumular una deuda neta total que alcanzó los 3.000 millones de euros el año pasado (4.100 millones de dólares).

En contraste, el grupo francés está logrando muy buenos resultados en China, que en mayo pasado se convirtió ya en su principal mercado internacional.

Sólo durante el primer semestre de 2013 su empresa mixta DPCA vendió 276.900 vehículos en todo el país, un 32,7 por ciento más interanual, con lo que consiguió ingresos por valor de 30.700 millones de yuanes (3.700 millones de euros, 5.000 millones de dólares).

De hecho DPCA aspira a conseguir una cuota del 5 por ciento del mercado chino para 2015, y durante esta segunda mitad del año está lanzando en China dos nuevos modelos, el Citroën C Elysée y el Peugeot 301.

Esta semana el ministro francés de la Reconstrucción Productiva, Arnaud Montebourg, aseguró que, ocurra lo que ocurra, PSA seguirá siendo una empresa "francesa y en Francia", y que el objetivo de todos es que PSA, que emplea a cerca de 100.000 trabajadores en su país, consiga relanzarse y volver a contratar de nuevo.

Según la prensa china, la oferta Dongfeng por el 30 por ciento de PSA es de 10.000 millones de yuanes (1.208 millones de euros, 1.634 millones de dólares).

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