Firmas estatales chinas aumentan su beneficio un 7 % interanual en mitad 2013

  • Las empresas estatales chinas (SOE, en inglés) incrementaron su beneficio un 7 % interanual en los seis primeros meses del año, cinco décimas más que el dato registrado durante los primeros cinco meses, según anunció hoy el Ministerio de Finanzas del país asiático.

Pekín, 16 jul.- Las empresas estatales chinas (SOE, en inglés) incrementaron su beneficio un 7 % interanual en los seis primeros meses del año, cinco décimas más que el dato registrado durante los primeros cinco meses, según anunció hoy el Ministerio de Finanzas del país asiático.

El informe mensual publicado por la institución recoge los datos de las compañías estatales del sector energético, electrónico, el de refinería, construcción e inmobiliaria, aunque no las cifras correspondientes a las firmas del sector financiero.

Según recoge la agencia oficial Xinhua, las compañías estatales pertenecientes a los citados sectores registraron un "relativo rápido crecimiento" durante la primera mitad de 2013 al lograr un beneficio total de 1,11 billones de yuanes (181.400 millones de dólares, 138.640 millones de euros).

Las firmas estatales administradas por el Gobierno central incrementaron su beneficio un 15,6 % en el citado periodo y respecto al año anterior, y alcanzaron los 805.700 millones de yuanes (130.753 millones de dólares, 99.961 millones de euros).

En contraste, las compañías estatales gestionadas por sus correspondientes Gobiernos locales perdieron un 10,6 % interanual en estos primeros seis meses con un 307.300 millones de yuanes (49.871 millones de dólares, 38.121 millones de euros).

Los ingresos de las empresas estatales se mantuvieron en los 21,95 billones de yuanes en los seis primeros meses, un 10,7 % más que en el mismo periodo del año anterior.

En 2012 las empresas estatales registraron unas pérdidas conjuntas de unos 50.000 millones de yuanes (8.116 millones de dólares, 6.160 millones de euros).

Muchos economistas chinos argumentan que las mayores compañías, especialmente los bancos y las empresas de telecomunicaciones, han crecido tanto -o están políticamente tan bien conectadas- que consiguen gran parte de los préstamos bancarios, una financiación que no llega a empresas más pequeñas pero con más potencial y que pone en jaque el crecimiento económico del país.

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