Sao Paulo, 5 dic.- La Fiscalía presentó hoy una demanda contra once empresas sospechosas de cometer irregularidades en las licitaciones para acceder a contratos con trenes urbanos y el metro del estado brasileño de Sao Paulo entre 2001 y 2002.
El promotor del Ministerio Público (Fiscalía), Marcelo Milani, pidió la anulación de los contratos firmados con la Compañía Paulista de Trenes Metropolitanos (CPTM), dependiente del Gobierno regional, y solicitó la devolución de 418,3 millones de reales (unos 161 millones de dólares).
El Ministerio Público también pidió la disolución en Brasil de diez de las once empresas acusadas, entre las que se encuentran la alemana Siemens y la francesa Alstom.
De acuerdo con el fiscal, la española Caf también está denunciada, pero al tratarse de una empresa con sede fuera de Brasil no está sujeta a la legislación brasileña.
"Ella (Caf) entra en la acción para resarcir el dinero que fue indebidamente ganado", afirmó el promotor.
Según Milani, hubo un acuerdo entre las empresas para que las vencedoras de esos contratos fuesen los mismos que los que construyeron y vendieron los trenes en el estado de Sao Paulo.
"Con eso, ellas disminuyeron los costes y garantizaron el dominio del sector", afirmó Milani en una rueda de prensa.
Alstom informó que "no fue notificada" y reiteró "el cumplimiento de la legislación brasileña", mientras que Siemens subrayó que "proactivamente compartió con las autoridades los resultados de su auditoría interna que dieron origen a las investigaciones relacionadas a la posible existencia de un cartel en el sector ferroviario".
"Siemens siempre deseó el apoyo al total esclarecimiento de este episodio por medio de las investigaciones conducidas por las autoridades públicas", añadió la compañía en un comunicado.
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