Fitch confirma la nota "AA" de Bélgica con perspectiva estable

Bruselas, 19 nov.- La agencia de calificación crediticia estadounidense Fitch confirmó hoy la nota de "AA" con perspectiva estable de Bélgica dada la capacidad de su economía y la mejora de la situación de su sector bancario, pese al elevado nivel de deuda pública que acumula el país.

La calificación de Bélgica de "AA" se basa "en su economía diversificada, su alta renta per cápita y las instituciones sólidas", destacó la agencia en un comunicado.

La "principal debilidad de la calificación de Bélgica", por contra, es la deuda pública del país, según Fitch, que estima que llegará a su máximo en cerca de 100 % del PIB en 2014.

No obstante, la agencia de medición de riesgo consideró que la evolución de la misma "se mantiene dentro de lo tolerable en la calificación 'AA'".

Respecto al déficit público, la agencia señaló que el país podría reducirlo al 2,6 % de su PIB al término de este ejercicio, lo que "implica que Bélgica debería salir del procedimiento de déficit excesivo de la UE el próximo año", en el que espera que caiga hasta el 2,3 %, dos décimas por encima del objetivo del Gobierno belga.

"En nuestra opinión, la posibilidad de un estancamiento político renovado tras las elecciones de mayo es real y aumenta los riesgos de deterioro fiscal", afirmó la agencia.

"Sin embargo, el historial de Bélgica, con largos períodos de gobiernos provisionales, sugiere que cualquier desviación podría ser contenida", agregó.

Fitch destacó también la mejora de la financiación del país en los mercados, así como que la economía belga salió de la recesión en el segundo trimestre de 2013 y que prevé una "modesta recuperación en 2014", aunque señaló que el desempleo continúa aumentando en el país y podría alcanzar un 9 % el próximo año.

"Sin embargo, la solidez de los balances de los hogares apoyarán al consumo privado, a pesar de una dinámica adversa del mercado laboral", aseguró la agencia.

Fitch también destacó que los costes laborales en Bélgica han superado a los de sus principales socios comerciales -Alemania, Francia y Holanda-, lo que ha causado una pérdida de competitividad de la economía belga, también frente a países de la periferia europea.

Respecto al sector financiero, fuertemente golpeado por la crisis, Fitch señaló que los "riesgos derivados de la banca están retrocediendo gradualmente".

Dexia se mantiene con el grupo bancario más frágil, dado que el "grupo aún tiene una importante cartera de activos residuales incluyendo bonos periféricos de la eurozona que se está agotando y que podría dar lugar a nuevos deterioros", aunque la agencia descartó que sean necesarias nuevas ayudas públicas.

Fitch indicó que la perspectiva estable que asigna al país se debe a que no anticipa eventos que puedan llevar a un cambio en la calificación de Bélgica.

Sin embargo, indicó que la evolución de la deuda pública y del déficit, un estancamiento político prolongado tras las elecciones de mayo de 2014 o el descubrimiento de nuevas necesidades de recapitalización del sector financiero podrían llevar a una rebaja de su nota.

Por el contrario, una reducción de la deuda pública o una "mejora tangible" de la competitividad de la economía del país podría llevar a la agencia a valorar al alza al país.