Fomento estudia que las infraestructuras las cofinancie el Estado en un 50 %

Madrid, 26 mar.- La ministra de Fomento, Ana Pastor, ha anunciado hoy que el Gobierno estudia nuevos proyectos de participación público-privada en el ámbito de las infraestructuras, en los que el Estado podrá financiar un porcentaje que podría llegar hasta el 50 %.

Durante su intervención en el VII Encuentro del Sector de Infraestructuras, Pastor ha subrayado además la necesidad de lograr un nuevo modelo de otorgar concesiones, sabedora de los problemas económicos que atraviesan muchas de las autopistas de peaje tras la caída del tránsito por las crisis y los sobrecostes derivados de las expropiaciones.

A pesar de confiar en el sistema de concesiones español, Fomento estudia ayudas financieras a las sociedades a través de las cuentas de compensación, los préstamos participativos u otras líneas que pasan por ampliar los plazos de las concesiones o acometer posibles fusiones.

Estas medidas destinadas a reequilibrar las concesiones de autopistas de peaje en dificultades buscan también repartir los riesgos en tres ámbitos: la revisión de los plazos máximos de concesión, el riesgo de las expropiaciones y el riesgo derivado del tráfico.

A pesar de esta situación, la titular de Fomento se ha mostrado esperanzada en que el Gobierno no tenga "nunca" que acudir al rescate de estas carreteras.

En este sentido también se ha manifestado el presidente de OHL, Juan Miguel Villar Mir, quien espera que Fomento aborde con urgencia el problema de las concesionarias, algunas en una situación "límite" e incapaces de atender sus obligaciones financieras, y ha apostado por la financiación privada para resolver los problemas de escasez de fondos públicos.

Los ejecutivos de las principales concesionarias de infraestructuras también han manifestado su preocupación y han pedido a la Administración que asuma su responsabilidad y alerte de los riesgos derivados de estos contratos, como los de explotación.

Asimismo, han subrayado que se debe perder el miedo a que el sector privado gestione las infraestructuras sin llegar a que la concesión se convierta en una "pura subasta" y han pedido la creación de un órgano independiente que garantice la seguridad jurídica en estos procesos, al tiempo que se fijan las responsabilidades de los actores.

En vista del actual escenario, las grandes entidades financieras han coincidido en la necesidad de cambiar el modelo de financiación de las grandes infraestructuras y han apostado por las emisiones de bonos para este tipo de operaciones, dadas las dificultades que presenta la fórmula tradicional actualmente para la banca.

Los directivos de Banco Santander, BBVA y Bankia han coincidido en señalar que el modelo financiación "project finance" ha "muerto" ya que las entidades no pueden soportar en estos momentos la financiación de infraestructuras a largo plazo.

Por ello, han resaltado la importancia de contar con una financiación más racional, selectiva y flexible que acorte los plazos de financiación hasta los 5 años en el marco de un modelo adaptado a las necesidades de la sociedad en el que tanto clientes como bancos se sientan cómodos.

La Confederación Nacional de la Construcción (CNC) ha insistido asimismo en el pago por uso de la infraestructura a fin de que los usuarios puedan contribuir a sufragar los costes de la misma, al tiempo que ha abogado por tarificar los tramos libres de peaje en autopistas y garantizar unos precios realistas en el transporte ferroviario y el agua.

Para acometer inversiones en infraestructuras "potentes pero coherentes", Pastor ha manifestado su deseo de contar con una planificación plurianual previsible, rigurosa y eficiente sin un elevado endeudamiento financiero que lo haga inviable.